Ensalada de arroz.

Ensalada de arroz.

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Esta es la mejor comida para llevar a la oficina: ligera, fácil de hacer, nutritiva y compatible con el calor de Sevilla

Otro aspecto clave es su precio. Todos los ingredientes son asequibles, fáciles de encontrar y compatibles con una planificación semanal.

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N. N.
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Encontrar una comida que sea rápida de preparar, cómoda de transportar y que además cumpla con los requisitos de una dieta equilibrada no es tarea sencilla. Sin embargo, hay una receta que cada vez gana más adeptos entre quienes almuerzan fuera de casa: la ensalada de arroz.

Este plato se ha convertido en la mejor opción para llevar a la oficina gracias a su ligereza, su valor nutricional y su versatilidad. No requiere más de diez minutos de preparación, y puede personalizarse al gusto de cada comensal. Además, al ser un plato que se come frío, es perfecto para la ciudad de Sevilla cuando aprieta el calor.

Uno de los trucos más prácticos para quienes no tienen tiempo es recurrir al arroz de microondas. En apenas un minuto se puede tener una base lista para consumir, sin necesidad de cocción ni lavado.

Este tipo de arroz, envasado al vacío, se encuentra fácilmente en supermercados y ofrece una textura adecuada para mezclar con ingredientes fríos. Su sabor neutro y su capacidad para absorber aliños lo convierten en una base perfecta para ensaladas rápidas y sabrosas.

La receta más habitual incluye ingredientes que aportan sabor, frescura y equilibrio nutricional. Al arroz cocido se le añaden trocitos de zanahoria cruda —que añade un toque crujiente—, maíz dulce, pavo en dados, atún en conserva y, si se desea, un toque de cebolla morada picada o aceitunas negras.

Baja en grasa

La combinación es colorida, saciante y baja en grasa. También es posible incorporar huevo cocido, aguacate o pepino para darle aún más variedad, aunque lo fundamental es mantener el equilibrio entre proteínas, hidratos de carbono y vegetales.

El aliño puede prepararse con antelación y llevarse aparte, aunque muchos prefieren añadirlo en el momento de hacer la ensalada. La opción más común incluye aceite de oliva virgen extra, un chorrito de vinagre (o zumo de limón), sal al gusto y, en ocasiones, una cucharadita de mostaza suave para darle más carácter.

Todo ello se mezcla con el arroz y el resto de ingredientes hasta conseguir un plato compacto y sabroso, perfecto para meter en un táper y guardar en la nevera.

Aporte energético

Desde el punto de vista nutricional, la ensalada de arroz destaca por su aporte energético sin resultar pesada. El arroz proporciona hidratos de carbono de absorción lenta, que ayudan a mantener la energía durante toda la jornada laboral.

El atún y el pavo son fuentes de proteínas magras, y las hortalizas como el maíz o la zanahoria aportan fibra, vitaminas y un toque crujiente que mejora la experiencia al comer. Además, al ser una receta fría, se conserva bien durante varias horas sin necesidad de recalentado, lo que la hace ideal para espacios de trabajo sin microondas.

Otro aspecto clave es su precio: todos los ingredientes son asequibles, fáciles de encontrar y compatibles con una planificación semanal. Preparar una cantidad mayor permite organizar varios táperes en un solo día, ahorrando tiempo y dinero sin caer en opciones ultraprocesadas o poco saludables.

Así, la ensalada de arroz se convierte en una de las comidas más eficaces y completas para llevar a la oficina. Rápida, ligera y nutritiva, se adapta al ritmo actual sin renunciar a lo esencial: comer bien, con sabor y sin complicaciones.