Cartel publicado por la US sobre el curso que buscaba enseñar a planchar a los hombres.

Cartel publicado por la US sobre el curso que buscaba enseñar a planchar a los hombres.

Educación

La Universidad de Sevilla aplaza el polémico curso para enseñar a los hombres a planchar al no disponer de todos los permisos

Desde la entidad educativa sostienen que el curso se "volverá a ofertar" y que el hecho de haberlo dado a conocer antes de tiempo fue "un error".

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La Universidad de Sevilla (US) "aplaza" el curso Construyendo Masculinidades, en el que proponían introducir a los hombres en las tareas domésticas, al señalar que "no ha terminado de pasar el proceso de verificación que deben pasar todos los cursos en la US".

Así lo confirman fuentes internas de la entidad educativa pública a EL ESPAÑOL. "El curso se ha aplazado", apuntan. Sin embargo, hace apenas tres días que la US publicó el curso, momento en el que todas las cabeceras de la ciudad se hicieron eco, lo que suscitó la polémica en seguida.

Desde la US apuntan a que "en cuanto esté terminado ese proceso" necesario para su publicación "se volverán a ofertar". Afirman que el hecho de haberlo dado a conocer fue "un error". "Se publicó la información antes de tiempo", defienden.

La Universidad de Sevilla, a través de su Unidad para la Igualdad, impulsó este programa educativo en colaboración con la Consejería de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad de la Junta de Andalucía.

Bajo el título Construyendo Masculinidades Corresponsables en las Tareas de Cuidado y del Hogar, la iniciativa pretendía sensibilizar y formar a los jóvenes en competencias relacionadas con el ámbito doméstico.

También buscaba instruir en los cuidados que tradicionalmente han sido relegados al papel femenino y que apenas ha sido abordado en el entorno académico.

El proyecto partía de una reflexión clave: no se puede exigir corresponsabilidad a los hombres si nunca han sido educados para asumir esas tareas.

Polémica en redes sociales

El curso pasó en cuestión de minutos a suscitar un aluvión de críticas. Los usuarios de X (antes Twitter) llegaron a hacer comentarios de la talla de "Ridículo espantoso de la Universidad de Sevilla. Cursos para todo el que lo necesite, hombre o mujer. Que las mujeres no nacen sabiendo".

En el mismo hilo de argumentación se ubicaba otro de los comentarios que más repercusión ha tenido: "Me parece extremadamente machista pensar que las mujeres nacen sabiendo planchar".

"Plancho y cocino mejor que mi mujer. Menudos estereotipos baratos", apuntó otro usuario en la red social.
Algunos comentarios se orientaron a señalar el curso de Masculinidades Corresponsables a "otro chiringuito". "Lo aprendí a hacer en mi casa", escribía, tajante, uno de los perfiles.
Sin embargo, tampoco tardaron en aparecer los comentarios de índole marcadamente machistas. "La igualdad entre sexos se ha convertido en una excusa para hacer a hombres y mujeres igual de inútiles", se leía en uno de los comentarios.
"Próximamente cursos para mujeres de la US para enseñarles a: aparcar coches, fontanería básica, configurar un router, sacar el filtro del extractor, sintonizar la TDT, alquitranar carreteras, matar bichos", escribía ofendido por la sugerencia de aprender a planchar un perfil masculino.

La Junta se suma

No obstante, la Universidad de Sevilla no ha sido la única en pensar en las nuevas masculinidades, ya que la Junta de Juanma Moreno presentó en marzo de este año, también en Sevilla, una campaña dirigida a los hombres andaluces.
El objetivo era concienciar sobre la importancia de asumir responsabilidades en las tareas domésticas y el cuidado familiar.
Con una inversión cercana a los tres millones de euros, el presidente andaluz destacó que se trataba de la acción "más ambiciosa" impulsada hasta la fecha por su Ejecutivo en materia de corresponsabilidad y conciliación.

Moreno subrayó el compromiso de su gobierno con la igualdad real entre hombres y mujeres, recordando que ya se habían puesto en marcha múltiples medidas en esta línea: desde el respaldo a iniciativas de ayuntamientos, universidades y entidades sociales hasta la organización de escuelas de verano y campañas de sensibilización.