Pedro Sánchez y 15 ministros viajan a Sevilla por la cumbre de la ONU, pero sin abordar ni un solo problema de la ciudad

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, clausuró este jueves la IV Conferencia Internacional sobre Financiación para el Desarrollo de la ONU. El socialista ha estado desde el lunes en Sevilla, donde ha tenido lugar el encuentro, pero no ha hecho ningún guiño a las reivindicaciones de la ciudad sede del encuentro internacional.

Así se lo hizo saber el alcalde de la capital andaluza, José Luis Sanz, este jueves, poco antes de que Sánchez subiese al estrado para dar el discurso de cierre de la Conferencia de la ONU. Pero, añadía el primer hispalense, el problema no estaba solo en el presidente del Gobierno. Hasta 15 ministros, más de medio Gobierno, ha pasado por Sevilla esta semana. Cero palabras sobre los problemas de la ciudad.

Sobre la mesa hay para elegir, señalan fuentes municipales. Desde el final de la obra del puente del Centenario, salpicada por el presunto caso de corrupción del PSOE, hasta la conexión del aeropuerto con Sevilla. Desde el final de la SE-40 hasta la inversión ferroviaria.

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Sanz fue claro este jueves: "Han pasado por Sevilla prácticamente todo el Consejo de Ministros y ninguno ha aprovechado para solucionar asuntos pendientes con la ciudad".

Un hecho que Sanz ha atribuido a la actuación "antisevillana que viene siguiendo el Gobierno central y el desprecio a la capital andaluza", y ha señalado que "no es una cuestión personal con el alcalde de Sevilla, sino que en estos momentos se preocupan por prolongar su supervivencia agónica sin nadie que lleve el timón y gestione los intereses de los sevillanos, ni los españoles".

Montero

En este sentido, Sanz ha apuntado que "no va a tirar la toalla" y va a seguir pidiéndole reuniones a la ministra de Hacienda, María Jesús Montero; al ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska y al ministro de Infraestructura, Óscar Puente, porque "son los que fundamentalmente con los que esta ciudad tendría que reivindicarse".

Por otro lado, el alcalde de Sevilla ha señalado que el "desprecio" del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, hacia los sevillanos al no invitar al alcalde a la recepción celebrada este lunes en el Palacio de Las Dueñas.

Una situación, que según Sanz, "evidencia el continuo desprecio del presidente del Gobierno a los sevillanos, que durante la mañana habían aguantado las incomodidades que supone un evento de estas características en materia de movilidad y a los 2.000 trabajadores municipales que están prestando servicio a la Cumbre". Así, ha apostillado que "tenemos al presidente más antisevillano de la historia".

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La falta de gestos a Sevilla, señalan fuentes municipales, no son solo en inversiones. Recuerdan cómo el presidente del Gobierno organizó una cena de gala en el seno de la conferencia de la ONU y dejó fuera al alcalde de la ciudad.

Destacan además que, para que esa cena se celebrase en el palacio de Dueñas, en el centro de la ciudad, debieron parar una obra importante y asfaltar una calle que, pasado el evento de unas pocas horas, hay que levantar de nuevo.

Ni por esas, indican, se invitó al alcalde de Sevilla como representante de todos los vecinos de la ciudad que acogían la cumbre internacional. Fuentes del Gobierno de Pedro Sánchez rebajaron la importancia de la falta de invitación a Sanz -también dejaron fuera al presidente de la Junta, Juanma Moreno- y explicaron a EL ESPAÑOL que ambos habían estado ya en la sesión de apertura de la conferencia.

Sea como fuere, Sevilla, recuerdan fuentes del Ayuntamiento, tiene muchos frentes en los que los muchos ministros que han viajado a Sevilla podrían haber atendido. Echan en falta desde el Consistorio gestos con la ciudad que ha soportado durante cuatro días cortes de tráfico y problemas de movilidad en medio de una Purísima ola de calor.

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Ni un gesto, resumen. Y eso que hay cuestiones para elegir. El ya citado puente del Centenario es una de las obras que centran ahora todo el interés político y de los ciudadanos. Porque esta infraestructura aparece en el informe de la UCO que apunta al cobro de comisiones por la adjudicación de obra pública.

Este escándalo ha llevado al exsecretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, a la cárcel y ha abierto la mayor crisis política viva por el Gobierno de Pedro Sánchez. Y la obra sigue sin acabar. Para más escarnio, Cerdán aseguró ante el juez que aceleró esa obra para que Juan Espadas ganase las elecciones municipales.

Tampoco se ha hablado estos días de la construcción de la SE-40, la carretera de circunvalación que acumula años y años de retrasos. Sin embargo, tiene tramos sin proyectar siquiera, lo que augura que no habrá una solución a corto plazo.

El Cercanías en Sevilla es otra cuenta pendiente que el Ayuntamiento recuerda insistentemente al Gobierno central y que, tampoco en el contexto del desembarco de 15 ministros estos días en Sevilla se ha abordado. Tampoco la ampliación de Santa Justa o la mejora del servicio ferroviario.