Bomberos de Sevilla trabajan para cerrar la persiana automática de una farmacia.

Bomberos de Sevilla trabajan para cerrar la persiana automática de una farmacia. E. E. Sevilla

Sevilla

Así se vivió en Sevilla un lunes de infarto por el apagón general: incomunicación, colas y caos en estaciones y carreteras

La incertidumbre reinó en la capital hispalense desde las 12:30. Cientos de miles de personas quedaron sin conexiones. Algunos barrios llegaron a la noche sin luz.

Más información: Desconcierto generalizado ante un apagón que paralizó la vida en Sevilla: "No podemos hacer otra cosa que esperar"

Sevilla
Publicada
Actualizada

Sevilla se enfrentó este lunes a una situación nunca vista. Un apagón general que llegó a paralizar la vida de la ciudad durante siete horas. En algunos barrios incluso más. Cuando llegó la noche en torno a las 21:30, todavía no había vuelto el suministro en muchos de ellos. Todo empezó a las 12:30, pero no habían saltado los fusibles, como comprobaron todos los sevillanos.

No tardaron en darse cuenta de que era un hecho insólito. A través de WhatsApp, que todavía funcionaba a duras penas, comprobaron que no había electricidad en toda Sevilla, tampoco en Huelva ni en Córdoba.

Fue minutos después, cuando empezó a reinar el desconcierto. Red Eléctrica informaba del fallo generalizado en toda España. Circularon numerosas teorías sobre el origen, pero ni siquiera Pedro Sánchez lo confirmó en su comparecencia de las 17:15. Se sigue investigando.

No funcionaban los semáforos. Los tranvías se quedaron parados en la Avenida de la Constitución. A otros les cogió en el Metro. Se cerraron todas las estaciones y hubo que evacuar a las personas que estaban en los trenes. También se rescató a quienes estaban atrapados en los ascensores.

También hubo caos en Santa Justa, que se quedó abierta en la noche de este lunes para acoger a aquellos viajeros que esperaban tren y no pudieron cogerlo. A algunos hubo que rescatarlos en mitad del viaje.

De hecho, el propio ministro de Transportes, Óscar Puente informaba de que a las 18:30 todavía quedaban por evacuar 14 trenes de las líneas Madrid-Sevilla.

En la ciudad reinó el desconcierto en las oficinas. Sin internet y casi sin cobertura, fue imposible la actividad para muchos de los negocios. Muchos se mantuvieron a la espera hasta la hora del almuerzo, cuando la mayoría de los trabajadores volvieron a casa.

No se podía hacer prácticamente nada. Tampoco llamar por teléfono. La mayoría de sevillanos lo intentaron, pero los que tuvieron más suerte apenas pudieron hablar 10 segundos. La falta de cobertura cortaba la conexión. Hubo muchas familias incomunicadas durante un periodo muy largo. A duras penas se podía enviar un whatsapp.

Algunos tenían que recoger a sus hijos de los colegios, pero se encontraron con el caos de tráfico, sobre todo en las entradas de Sevilla. Hubo retenciones de en torno a los 3 kilómetros en distintos puntos de la SE-30, en la A-49 y en la Ronda Urbana Norte.

Tráfico regulado por Policía Local

Era la Policía Local la que se encargaba de regular el tráfico. El Ayuntamiento de Sevilla activó el plan de emergencias en fase 1 desde el primer momento y pidió que se evitaran los desplazamientos innecesarios, pero algunos sí eran ineludibles. Sí funcionaron con normalidad taxis y autobuses. Incluso se pudo pagar con tarjeta en estos últimos.

El alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, se trasladó al centro de control de Policía Local desde el comienzo del apagón. Es allí desde donde se gestionaron las numerosas incidencias. La mayoría fueron rescates de ascensores o para ayudar a personas mayores a subir a sus casas. También hubo que abrir viviendas.

Los Bomberos trabajaron durante toda la tarde para que aquellos negocios con apertura de puertas automáticas, pudieran cerrar. Se recomendó cerrar a los centros comerciales durante la tarde.

En el centro se mantuvieron abiertos a la hora del almuerzo muchos establecimientos, aunque apenas pudieron servir tapas frías. En sus mesas había muchas tapas de ensaladilla y bebida en un día de mucho calor. A buen seguro, en muchas casas y oficinas ya se había estrenado el aire acondicionado.

La calles del Casco Antiguo estaban llenas también de turistas, que buscaban cobijo en los bares tras ver como el Alcázar y la Catedral cerraban. Los hospitales pudieron seguir trabajando con sus propios generadores, aunque se cancelaron la mayoría de cirugías de importancia.

Durante la tarde, pese a la vuelta de algunos semáforos, Policía Local continuó controlando el tráfico en puntos estratégicos. Se prolongó el turno de mañana y el de tarde, duplicando el número de efectivos. El servicio de Bomberos y Protección Civil quedó también reforzado.

Volvió a luz a partir de las 16:30

Tras muchas horas de incertidumbre, fue a partir de las 16:30 cuando comenzó a volver la luz en algunos barrios. A las 19:00 tenían suministro Enramadilla-Carlos V, Triana, Los Remedios, el entorno del Lope de Vega, la Avenida de los Descubrimientos (Cartuja), San Bernardo/Viapol, Luis Montoto, Bellavista y Montequinto.

Se dieron durante la tarde circunstancias muy curiosas, como en Juan Antonio Cavestany, cerca de Santa Justa. Allí se escucharon aplausos al volver la luz. Había calles donde la electricidad volvía en una acera y en otras no.

Los vecinos de la mayor parte de Triana pudieron encender la luz, pero en parte de Pagés del Corro todavía estaba cortada a las 21:00. "¿Por qué no tenemos luz?", preguntaban desde uno de los balcones a voluntarios de Protección Civil. Tampoco había luz todavía en El Tardón ni en barrios como San Jerónimo o el entorno de Reina Mercedes.

Colas en supermercados

También fue un día de colas en los supermercados. Reinó el Mercadona, donde se podía pagar con tarjeta, un gesto cotidiano, pero imposible en la mayoría. Otros decidieron cerrar. Muchos se abastecieron con agua mineral. También con papel higiénico, uno de los clásicos de la pandemia. Estos estantes estaban vacíos a última hora de la tarde.

Fueron muchas horas de incertidumbre para los vecinos de una ciudad que nunca habían vivido situaciones de este tipo. Un apagón general que dejará huella en Sevilla.