Imagen de archivo de una actuación policial en las Tres Mil Viviendas. Sevilla
Una fiesta callejera en las Tres Mil Viviendas acaba con altercado en plena madrugada
Se escucharon varias detonaciones. Ninguna de ellas iba dirigida a agentes de la Policía Local, encargada del desalojo. No se registraron daños materiales ni humanos.
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Una fiesta callejera en la que participaban al menos 20 personas en las Tres Mil Viviendas finalizó con disparos. Sucedió en la madrugada del domingo al lunes en torno a las 4 de la mañana en la calle Tio Mariano Vizarraga, la zona conocida como Los Marrones.
La Policía Local actuó para disolver la celebración ante el aviso de los vecinos. Estaban alertados ante el intenso ruido generado por esta concentración, con música incluida.
Los agentes desplazados al lugar llegaron a escuchar entre "cinco y siete detonaciones", según fuentes sindicales. Ninguna iba dirigida a ellos ni se registraron heridos. En principio, eran disparos al aire, aunque se desconoce cuál fue su origen.
Episodios de este tipo han sido habituales en meses recientes. El último de ellos se produjo en las pasadas fechas navideñas. Tanto la Policía Local como la Nacional se movilizaron para atajar una fiesta con más de ochenta personas. Acabó con dos detenidos. Los agentes fueron increpados y soportaron lanzamientos de piedras y sillas.
En esta ocasión no ha habido que lamentar daños. En torno a las 4 de la mañana recibieron la llamada de los vecinos. Informaban de una fiesta de unas 20 personas en la calle Tío Mariano Vizarraga, aunque no se descarta que fuera más numerosa en algún momento. Se cobijaban en torno a una carpa y estaban sentados en torno a una larga mesa.
Disparos al aire
Los agentes se desplazaron al lugar para avisarles de que debían disolver la concentración. Sin embargo, media hora después, en torno a las 4:30, la celebración continuaba pese a la advertencia previa, tras lo que procedieron a dar orden de desalojo y a retirar todos los enseres.
Entre medias, cuando estaban en un punto intermedio, los agentes escucharon varias detonaciones, ninguna dirigida hacia ellos. Tampoco consta que se haya registrado ningún herido producto de estos disparos.
Los agentes comprobaron posteriormente que había casquillos de bala en el suelo. No obstante, en principio, se entiende que fueron disparos al aire, según indican las fuentes consultadas por este medio.
Tal como indican fuentes municipales, no hay ninguna investigación abierta en el seno de la Policía Local, que finalizó el servicio cuando se dio aviso a Lipasam para dejar limpia la zona.
Se trata de un gesto muy habitual en este tipo de celebraciones. En este caso no hubo daños materiales ni humanos que lamentar como sí ha sucedido en anteriores ocasiones.
