No hay fecha por ahora para que los sevillanos vean cómo se reduce la presión del agua en sus grifos durante las noches. La razón, que se prevén lluvias en el mes de febrero, según ha explicado el alcalde de Sevilla, José Luis Sanz. 

Llueva o no llueva, ha insistido el primer edil, Emasesa tiene "todos los planes de contingencia listos". Hay previsión para un escenario de lluvia pero también si no hay precipitaciones hasta el verano. 

Entre los planes que maneja Emasesa están la extracción del agua del Guadalquivir, así como recurrir a  aguas del sistema Huesna y de aguas subterráneas así como del embalse de El Pintado.

[Los sevillanos beberán agua del Guadalquivir si la sequía aprieta y ya se contempla que se acaben las reservas]

Esos son, en todo caso, escenarios a futuro. Por ahora hay optimismo moderado en el Consistorio porque las previsiones anuncian agua a los largo de febrero. De ahí que no haya fecha aún para posibles restricciones. 

"Dicen que en estos días de febrero va a volver a llover", ha señalado el alcalde. "Si esas perspectivas se cumplen, Emasesa anunciará en los próximos días en qué días se aplicará la bajada de presión", ha añadido.

Subida de precio del agua

La falta de lluvia está relacionada con un punto clave para los sevillanos: la subida de la factura del agua que se aprueba en el Pleno de este miércoles en el Ayuntamiento de Sevilla. 

Según ha explicado Sanz, la sequía ha provocado un "labor de ahorro" de agua de los sevillanos a la hora de afrontar la sequía. Eso ha provocado "un perjuicio económico a la empresa", en referencia a Emasesa. 

A eso se suma, ha señalado Sanz, el que en Emasesa no se han hecho inversiones de calado en los últimos años. "Por todo eso hay que subir las tarifas", ha indicado el primer edil.