La cultura volvió a unir al pleno de A Coruña. La nacionalista Mercedes Queixas defendió una moción que, dijo, busca "dar unha nova oportunidade" para que la ciudad consolide su condición de ciudad de la cultura, reclamando avances que el Ayuntamiento todavía tiene pendientes: la rehabilitación da Casa de Rosalía, el impulso definitivo a la Fundación Luis Seoane o el cumplimiento del acuerdo relacionado con la calle para los Diplomáticos de Monte Alto.
Para Queixas, la creación del Espazo Groba debe ser un paso decisivo para reforzar al Ayuntamiento como impulsor cultural, al acoger el legado del maestro Rogelio Groba, formado por más de 700 obras de extraordinaria diversidade e calidade.
La iniciativa plantea dotar a A Coruña de un espacio que pueda acoger la sede da Fundación Rogelio Groba, su arquivo documental, la difusión pública de ese patrimonio y un centro cultural multicultural para investigación, formación y actividades.
"A maior parte da súa traxectoria sementou na Coruña; é o noso deber coidar e proxectar o seu legado", señaló Queixas, alertando de que otros países, como Inglaterra o Suiza, han mostrado interés por ese patrimonio. "Sería unha páxina negra na historia da Coruña deixalo marchar".
El concejal del PP, Roberto Coira, anunció su apoyo tras un breve cruce de palabras con el primer teniente de alcaldesa, que en ese momento presidió de forma circunstancial el pleno.
Respaldó la creación del Espacio Groba y criticó la "falta de comunicación estable" del Gobierno local con el sector cultural.
Recordó que la fundación solo pide una sede para difundir el legado del compositor y que la ciudad dispone de múltiples contenedores culturales que podrían acogerlo.
Como añadido, propuso defender el proyecto musical Noites na Cidade Vella, que acerca conciertos gratuitos al público.
Coira aprovechó para denunciar el "deterioro" de equipamientos como el Palacio de la Ópera, las bibliotecas, el Aquarium o la Domus, y alertó de que convenios clave para 41 entidades culturales siguen congelados.
Desde el Gobierno municipal, el concejal de Cultura, Gonzalo Castro, celebró el consenso y aseguró que no tiene inconveniente en ofrecer "unha comparecencia monográfica" sobre la gestión cultural.
Afirmó que el Ayuntamiento ya trabaja con la fundación desde hace tiempo y que el compromiso con el proyecto es "claro, contundente e incuestionable".
Reveló además que la ambición va más allá: la creación de un Instituto Galego da Música, un centro de documentación musical, espacios de investigación y un programa estable de actividades contemporáneas.
"Queremos un proxecto estruturante, de cidade e de país, que consolide o noso liderado cultural", dijo.
Sobre la aportación del PP, Castro coincidió en reforzar Noites na Cidade Vella, encajándola en la preparación del Espazo Groba. Indicó que ya se analizan alternativas físicas para su ubicación, como la Casa da Veeduría en el espacio que provisionalmente utiliza la AESIA.
"A cultura volve demostrar que ten un valor inmenso e que é capaz de unir a cidade arredor de proxectos que nos superan", celebró como previo a una votación se cerró con unanimidad.
