Algunos aún recuerdan cuando A Coruña era una ciudad tranquila en la que nunca, o casi nunca, pasaba nada. Un asesinato al año. Dos como mucho. Sin embargo, lo vivido en la última semana rompe por completo con esa imagen de ciudad en calma.
El pasado sábado 13 de diciembre de 2025, la A Coruña se despertaba con una trágica noticia: un joven de 20 años fallecía tras ser apuñalado en el parque de Santa Margarita.
Víctima y agresor dormían en la calle. Según las primeras investigaciones, ambos se habrían enzarzado en una pelea a raíz del lugar en el que iban a pasar la noche. Presuntamente, la víctima golpeó primero a su agresor con una botella, tras lo cual este sacó un arma blanca y le asestó una puñalada mortal.
El joven falleció en el mismo lugar de los hechos alrededor de las 21:00 horas, en la zona de los baños públicos del parque, a escasos metros de donde suelen pernoctar personas sin hogar.
El presunto agresor ingresó en prisión provisional este lunes, después de pasar varias horas detenido en la comisaría de Lonzas. La investigación continúa abierta bajo la supervisión de la Brigada de Policía Judicial, que, según fuentes del TSXG, ha citado a varios testigos para esclarecer los motivos del homicidio y confirmar la participación del detenido.
Apuñalada por su compañero de piso
Apenas siete días después, A Coruña volvía a verse sacudida por otro crimen que ha conmocionado a la ciudad en las últimas horas.
Este sábado 20 de diciembre de 2025, sobre las 14:30 horas, una joven fue apuñalada en el cuello, presuntamente por su compañero de piso. Fue trasladada en estado muy grave al hospital, pero no se pudo hacer nada por salvarle la vida. Esta misma madrugada se confirmó su fallecimiento.
El presunto autor se encuentra detenido y está previsto que este lunes pase a disposición judicial.
Lo llamativo de este crimen fue la forma en la que la ciudad se enteró. Fue un incendio lo que alertó a los vecinos de la zona de Riazor, cuando una gran humareda tiñó de negro las inmediaciones, haciendo pensar en un fuego fortuito en una vivienda.
Minutos después se supo que las llamas se habrían originado en un edificio del Paseo de Ronda durante una discusión entre tres compañeros de piso, momento en el que —antes o después— se habría producido la agresión mortal.
La Policía mantiene abierta la investigación para esclarecer los hechos y determinar cómo se originó el incendio en la vivienda, en la que residían varias personas.
Fallecimiento durante una intervención policial
Por último, a mediados de semana se conocía otro suceso que generó una gran polémica social. Un vecino de 35 años falleció tras una intervención policial en un edificio de la calle de la Merced, durante la madrugada del martes.
La Policía Local y la Policía Nacional acudieron al lugar alrededor de las 03:00 horas, alertados por vecinos que denunciaban que el hombre estaba dando golpes y gritos en distintas puertas del edificio y en el ascensor.
Según fuentes próximas a la investigación, al llegar los agentes, el hombre salió al rellano portando un cuchillo de cocina, por lo que fue reducido y esposado.
Una vez inmovilizado, comenzó a presentar síntomas de una parada cardíaca. Los agentes solicitaron asistencia sanitaria de inmediato y se le practicaron maniobras de reanimación cardiopulmonar hasta la llegada de una ambulancia, aunque finalmente no se pudo hacer nada por salvarle la vida.
Este último suceso ha derivado en un conflicto entre familiares y fuerzas de seguridad, con acusaciones por parte de la Comunidad Gitana, un asunto que continúa bajo investigación y que ha abierto un intenso debate social en la ciudad.
Una semana rodeada de conflictos
Tres episodios distintos, sin relación entre sí, pero concentrados en apenas una semana, han vuelto a poner el foco sobre una ciudad que durante años fue percibida como tranquila y ajena a la violencia extrema.
Mientras las investigaciones siguen su curso, la ciudad asimila unos días difíciles que han dejado una huella profunda.
