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El apagón general que afectó a toda España tuvo especial incidencia en aquellos locales de hostelería o alimentación que no contaban con generadores propios para mantener la cadena de frío de los alimentos. Los helados fueron, precisamente, uno de estos productos que más riesgo tenía de desperdicio. Por este motivo, las heladerías de A Coruña se adaptaron, como pudieron, a una jornada insólita.

Afortunadamente, el lunes en la ciudad fue un día casi veraniego en cuanto a las temperaturas. Esto, sumado a la falta de conexión y electricidad, animó a múltiples coruñeses a salir a las calles. En el local The Bio Factory de Riego de Agua aprovecharon esta situación para repartir entre los viandantes helados gratis, evitando así tener que tirar todo el producto y sorprendiendo a quienes por ahí pasaban.

María Paz, una de las trabajadoras, relata que la heladería todavía no había abierto sus puertas cuando, a las 12:33 horas de ayer, el apagón paró en seco a todo el país. "Houbo preocupación na fábrica —situada en el polígono de Pocomaco— pero máis na xeadería. A fábrica está mellor equipada para aguantar, en cambio aquí no aguantaban os xeados. Empezamos a pensar en que facer, porque xusto repuxeramos os arcóns, estaban ata arriba de xeado e non sabíamos que facer", cuenta hoy.

¿La solución? Regalar helado gratis. Desde las 17:00 horas, esta heladería repartió su producto entre los viandantes sorprendidos, alegrando un poco un día sin duda extraño. "En dous minutos xa se formou cola e estivemos como cinco ou seis horas repartindo xeados", hasta que ya no había luz natural y todavía no había regresado la artificial. María recuerda como, a ciegas, llenaban las tarrinas en el interior oscuro del local.

"Aínda que non gañaramos os cartos, polo menos non tiramos comida", explica. La reacción de los clientes no pudo ser mejor, como era de esperar. Con el reparto de estos helados elaborados con productos sostenibles hay quien no pudo evitar señalar que, aquí, como indicó un cliente, "somos ecolóxicos por fóra e por dentro".

La heladería The Bio Factory este martes. CGM

Este martes, la actividad en The Bio Factory es de normalidad. Todavía es pronto para saber si esta inesperada campaña servirá para fidelizar clientes, pero, por lo menos, sirvió para minimizar pérdidas.

Así sobrevivieron al apagón las otras heladerías de A Coruña: "Pensamos que iba a ser un nuevo Covid"

Muy cerca de allí, en una de las heladerías de la Marina, la Colón, no se registraron pérdidas económicas porque habitualmente ya cierran los lunes por descanso del personal. Esto permitió que simplemente tuvieran que estar pendientes del producto ya terminado y también de los ingredientes que tienen en el local para elaborar sus helados artesanales.

Paula Restrepo, manager del local, explica que el dueño tuvo que comprar "in extremis" un generador para evitar la pérdida de los alimentos.

Así, aunque la Colón mantuvo sus puertas cerradas, en su interior la actividad era frenética intentando salvar el producto hasta que de madrugada volvió la luz.

"Hubo suerte de que llegó la luz y ya no había que tirarlo todo", indica Paula, antes de añadir optimista que "ahora el generador ya va a quedar ahí, porque nunca se sabe".

La heladería Colón este martes, después del apagón general. CGM

A unos metros, en Rafa Gelato, afortunadamente sí contaban ya con un equipo electrógeno que les "salvó" el día. Los responsables recogieron el producto en todos sus puntos de venta para ponerlos en el furgón que tienen preparado para transportar congelados.

"El grupo electrógeno nos salvó de perder mucho producto y mucho tiempo de producción en una época en la que es ya la temporada de tomar helados", explican desde el comercio, que solo tuvo que lamentar las pérdidas económicas de las ventas de un día.

Bico de Xeado este martes, después del apagón general. CGM

En Bico de Xeado tampoco se abrieron las puertas en el lunes del apagón. Estas tiendas también tienen generadores propios que lograron capear las más de 12 horas de apagón, por lo que así evitaron "por sorte" las pérdidas de helado.

Esto permitió que la jornada de ayer —un día en el que se alcanzaron temperaturas de 26 grados en la ciudad— no fuera de grandes pérdidas para esta heladería, que de todas formas decidió no abrir ante la incertidumbre de cuándo se recuperaría la luz y el calor que hacía.

Vanesa Agrafojo, empleada del local, indica que aquí trabajan con poco stock debido a la proximidad de la fábrica —situada en el polígono de Bergondo—, lo que también ayudó a conservar el helado. "O reparto pode traer en calquera momento o xeado. Así que xogamos con esa vantaxe", resalta.

Interior de la Ibi este martes, después del apagón general. CGM

En la Ibi, otra de las heladerías más conocidas de la ciudad, el apagón general les pilló con el local abierto. Gonzalo Gallego, dueño del local, explica que cuando supieron del alcance de la incidencia decidieron cerrar la heladería.

La proximidad de sus obradores, en un par de bajos del centro de la ciudad, permitió que en esta heladería no se perdiera mucho helado. "Trajimos un generador para lo más crítico, el helado, que es lo que más conservación necesita", explica, añadiendo que la nata que montan en el local también necesitaba "frío continuo".

"Casi pensamos que iba a ser un nuevo Covid, pero al final no. Esperábamos que viniese antes la luz y tuvimos que estar pendientes hasta la madrugada. Cuando llegó, lo afianzamos con la corriente y demás", relata.

La parte positiva es una lección aprendida: "Hay que tener cuidado y estar preparados".

Colas en la heladería Puerta Real este martes, después del apagón general. CGM

En la esquina de la Marina, en la heladería Puerta Real, se tomó la decisión de no abrir este lunes, en el que el producto se mantuvo en las cámaras de congelación. "Aguantaron perfectamente", indica Jenni Refojo en la heladería, que en este soleado martes sí estaba atendiendo a la clientela sin ningún inconveniente.

Como su producto se elabora en una nave, los helados ya preparados fueron lo único en peligro pero, afortunadamente, no tuvieron que tirar mucho producto.