Tim Cook
Apple acelera para fabricar chips en EEUU: así es el nuevo plan de la compañía para acabar con retrasos
La compañía espera reducir la brecha existente entre las producciones estadounidenses y taiwanesas, aunque no faltarán problemas.
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Apple es una de las compañías más importantes del sector de los semiconductores. Los de Cupertino han demostrado altísimas capacidades con sus procesadores M4, M4 Pro y M4 Max, presentes en una variedad de productos lanzados en España, como son los nuevos MacBook Air, los iMac renovados y los nuevos Mac Studio (incorporando, eso sí, el M3 Ultra). Tras los problemas sufridos en la exportación de sus chips a terreno estadounidense, Apple aspira a poder construir sus próximos chips de forma más rápida, según expone 9to5Mac.
Así lo relata el medio Nikkei Asia, citando a TSMC, la Taiwan Semiconductor Manufacturing Company, la multinacional de fabricación de semiconductores más importante del mundo y responsable de los procesadores de Apple y de otras tantas firmas, como los chips de AMD o Nvidia. A ojos de TSMC, la empresa no tendrá tantos problemas a la hora de trasladar la producción de chips de Apple a Estados Unidos.
Y es que cuando Apple anunció su idea de usar chips estadounidenses fabricados en la primera planta de TSMC de Arizona en 2022, no esperaban que este plan sufriera tanto como ha sufrido. La iniciativa exploraba la idea de construir varias plantas de fabricación de chips de TSMC en el estado de Arizona, consiguiendo que parte de la producción se reservara para chips de Apple destinados a dispositivos más antiguos. Numerosos retrasos y problemas causaron que la producción se pospusiera hasta este año cuando debía haber comenzado en 2024.
Apple fabricará a un mejor ritmo
En enero se supo que Apple aumentó enormemente la producción de sus chips en la planta de TSMC de Arizona, pero dejando sus mejores procesadores para las fundiciones de TSMC en el extranjero. Actualmente, TSMC está construyendo su tercera planta de chips en Arizona, gracias al apoyo de la ley CHIPS de Estados Unidos, por lo que los planes de TSMC y Apple van viento en popa.. El problema es que la primera de ellas solo puede fabricar ciertos tipos de procesadores, de mayor tamaño y destinados a productos más antiguos, como los iPhone 14 Pro y 15.
Otra cuestión refiere a la idea de los costes temporales. Poner en funcionamiento una nueva planta implica años de esfuerzo, lo que podría provocar que la producción de chips estadounidenses quedara relegada casi inequívocamente a este tipo de dispositivos más antiguos, con el peligro que supone que pueda sufrir más problemas de este estilo. TSMC habría prometido a sus inversores que este lento ritmo de desarrollo no se repetirá en las siguientes construcciones.
Mientras que la primera planta tardó cinco años en construirse, TSMC ha prometido que las futuras plantas estadounidenses no tardarán más de dos. Con el calendario en la mano y con las promesas de la empresa, TSMC daría comienzo a una planta de 3 nanómetros en 2028 y una futura planta de 2 nanómetros antes del año 2030. Aún con todo, los mejores chips de Apple, reservados para los últimos lanzamientos de la firma californiana, seguirán dependiendo de la producción taiwanesa.
Así, TSMC augura que Apple podrá producir más chips en Estados Unidos y a un ritmo sustancialmente más rápido respecto a lo visto en el pasado. Si bien esto no soluciona el problema sobre la producción de Estados Unidos y Taiwán, reduce enormemente la brecha entre las dos, ayudando a que Apple pueda unificar mejor estas dos producciones y no recibir presiones por parte del ejecutivo estadounidense, tal y como ha hecho en el pasado.
