Enfermedades como el colesterol o la celiaquía que tradicionalmente se han analizado mediante análisis de sangre, pruebas incómodas y lentas, ahora empiezan a estudiarse a través de la saliva. Adultos y niños pueden beneficiarse de nuevos métodos para detectar y controlar estos problemas de salud en cuestión de minutos como este 'chupachups' tecnológico inventado en España. 

Entrar en una farmacia, saborear el caramelo durante unos minutos y esperar que el resultado se suba a la plataforma digital donde comprobar que el colesterol sigue en niveles óptimos. Este es el proceso de The Smart Lollipop, un invento catalán que pretende endulzar el cuidado de las personas con celiaquía o hipercolesterolemia que pueden tardar años en tener el diagnóstico adecuado. 

"La hipercolesterolemia es asintomática en los más pequeños por lo que no se suele diagnosticar hasta que ya se es adulto, lo que nosotros queremos aportar es una solución rápida sin análisis de sangre", explica a EL ESPAÑOL-Omicrono, Diana Ballart, CEO y Cofundadora de esta empresa catalana.

Cofundadores Roger García, Diana Ballart, Lorena Toda y, CTO, Albert Valeta (izq a dch) The Smart Lollipop Omicrono

La idea nació en 2017 durante el Innovation Challenge iFest impulsado por Pau Gasolt en el que el equipo ganó la competición. Desde entonces han seguido defendiendo su propuesta hasta conseguir en 2022 su última ronda de financiación de 320.000 euros, contando con la asesoría de la Conselleria d'Empresa i Treball, entre otros. 

El equipo de The Smart Lollipop lo forman seis personas y tiene su sede en el Parc Científic i Tecnològic de la Universitat de Girona. A esa financiación se suman 210.000 euros a través de un préstamo que facilitarán la puesta en marcha de estudios clínicos en hospitales de Cataluña y que este caramelo inteligente llegue con el tiempo a los pacientes y detecte muchas más enfermedades.

Sabor a fresa

No son pocas las personas que por miedo a las agujas aplazan realizar exámenes médicos que pueden ser decisivos para su bienestar. En este sentido, la saliva se está posicionando como alternativa al estudio de la sangre, un líquido más cómodo de recoger y del que se puede extraer mucha información. Como solución: la versión tecnológica de uno de los inventos españoles más conocidos, un dulce con un palo.

"El caramelo es un perfecto recolector de saliva, la gente se piensa que es fácil (recoger este líquido). En adultos sí, pero los niños no saben escupir y aportar la cantidad de saliva que se necesita", explica Ballart. De ahí la utilidad del caramelo de distintos sabores, que es libre de azúcares y cuenta con una composición aceptada por la comunidad médica. 

Datos del análisis en la plataforma digital The Smart Lollipop Omicrono

Además de fomentar la secreción de saliva mientras la persona disfruta del 'chupachups', el dispositivo recolecta el líquido y lo limpia de impurezas antes de proceder a analizarlo. "El plasma, que es la sangre, es un fluido muy limpio, extremadamente limpio, por eso se utiliza tanto, pero la saliva no", añade su cocreadora.

Una vez limpia la muestra, los biosensores se encargan del análisis. Explican sus creadores que el sistema no se ve afectado por los componentes del caramelo, obteniendo un estudio de la salud del paciente como el que se conseguiría con una muestra de sangre.

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En último lugar, se encuentra el dispositivo capaz de digitalizar el resultado completo y transmitirlo a la plataforma donde los especialistas y el paciente puede consultar los datos. La start-up catalana aún está valorando cómo aportar esos datos al usuario, pero el proceso se ha diseñado para que siempre esté acompañado por un sanitario o farmacéutico.

Medir el colesterol en minutos

El 'chupachups' se podrá dar en la consulta médica como ilustra el vídeo promocional o comprar en la farmacia. Este dulce inteligente será un producto individual de un solo uso, pero la base que digitaliza el análisis se reutilizará para cada caso siempre bajo el control del especialista.

Este sencillo método promete un resultado rápido en el diagnóstico y control de diferentes en enfermedades, la empresa baraja tiempos en torno a los 10 minutos. De momento, solo está disponible el estudio de hipercolesterolemia y celiaquía, pero su intención es crecer a otros diagnósticos.

Cofundadores Lorena Toda, Diana Ballart, Albert Valeta (CTO) y Roger García (izq a dch) The Smart Lollipop Omicrono

"La hipercolesterolemia afecta tanto a niños como a adultos que pueden pasar años sin recibir un tratamiento o control adecuado. Explica Ballart que el uso de The Smart Lollipop puede simplificar la monitorización del colesterol, un proceso rutinario que por ahora requiere de pedir cita médica, la realización del análisis y la espera de los resultados, tardando incluso meses en conocer los resultados.

Con este dulce inteligente, el sistema sería similar a medirse la tensión o pesarse en la farmacia cerca de casa, pero centrado en conocer cómo se encuentran los niveles de colesterol del paciente y valorar si la dieta o medicación recetada está siendo efectiva o hace falta una nueva consulta.

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"En el caso de la celiaquía, esta intolerancia es multisintomática, hay niños que muestran problemas de crecimiento, dolores de cabeza o de estómago", poder realizar pruebas menos invasivas y más rápidas ayuda a descartar o indicar el origen de estos síntomas en esta intolerancia con mayor rapidez.

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