Las grandes ciudades son gigantes de asfalto donde los efectos del clima se multiplican dificultando que sus habitantes puedan disfrutar de la vida al aire libre y relacionarse en la calle. Ciudades como Madrid proponen crear algunos jardines con los que suavizar el clima en la capital, mientras en Dubái se quiere animar a los dubaitíes y turistas a moverse andando o en bici por un espacio aclimatado con energía limpia.

Para hacer ejercicio sin percibir el sofocante calor que reciben las calles de Dubái, The Loop es un recorrido de 93 kilómetros que utilizará aire acondicionado y reciclará agua, motivando a sus habitantes a desplazarse sin el coche por un recorrido en el que cada pisada servirá para generar energía cinética y donde se cultivarán verduras.

El objetivo es convertir el ciclismo y la caminata en los principales modos de transporte diario para más del 80% de los habitantes de Dubái en 2040. Inspirados en la movilidad de las ciudades europeas, la empresa URB ha presentado este proyecto para ayudar a Dubái a convertirse en la ciudad más inteligente.

Explican los representantes de URB a NewAtlas que el proyecto se encuentra actualmente en etapa de investigación. Es una infraestructura de grandes dimensiones lo que hace difícil que termine haciéndose realidad, pero este tipo de propuestas increíbles son bien acogidas en Oriente Medio.

Un clima propio

Paseantes y ciclistas recorren los 93 kilómetros de The Loop en un entorno vegetal y fresco muy diferente a las duras condiciones del exterior. Esto se consigue con una estructura acristalada que recuerda a la ballena de la Puerta del Sol en pleno centro de Madrid y cubre el recorrido protegiéndolo de la incidencia del clima exterior. Así se crea un hábitat interno más agradable para hacer ejercicio y otras actividades. 

The Loop URB Omicrono

Como si de un invernadero se tratara, la estructura levantada sobre pivotes deja pasar la luz y facilita el crecimiento de vegetación en el interior. Además del mencionado carril bici y la calzada para peatones y corredores, The Loop incluirá otra serie de servicios integrados para compartir entre los distintos barrios que rodea la instalación. 

En unas zonas se instalarán cultivos verticales para nutrir de alimentación a la población, mientras otras zonas se enfocan en proporcionar ocio y bienestar, con parques y centro sociales. Para hacer deportes habrá estaciones de fitness y canchas deportivas. De cara al ocio, integrarán hoteles y centros de bienestar para que este sea también un punto de referencia para el turismo de la ciudad.

Cultivos en The Loop URB Omicrono

En la península arábica se sitúan otras ideas similares en estilo donde la vegetación, las energías renovables y el lujo crean ciudades del futuro más agradables para sus ciudadanos. The Loop, recuerda a The Line en Arabia Saudí que libera a los habitantes del bullicio del coche usando trenes y dividiendo la ciudad en barrios de viviendas y trabajo para llegar en pocos minutos a cualquier lado.

Caminar genera energía

Sin embargo, a diferencia de The Line, las energías renovables de The Loop no nacen de los elementos naturales, sino de las personas que lo recorren. El hábitat se nutrirá del uso que hagan de él las personas. Los pasos de cada visitante se convertirán en energía renovable a través del pavimento cinético.

The Loop URB Omicrono

Bajo el paseo, los generadores de inducción electromagnética se desplazan verticalmente por el peso de cada viandante. Ese movimiento crea energía y alimenta a los generadores que la transforman en electricidad para los servicios de The Loop. "Las pasarelas cinéticas promoverán el compromiso social en la sostenibilidad, al tiempo que fomentarán un sentido de participación colectiva de una manera divertida", afirma URB.

Los pisos de recolección de energía representados con forma heptagonal están hechos de llantas de automóvil recicladas, que se flexionan cuando se pisan. Esta pavimento cinético muy posiblemente correría a cargo de la empresa Pavegen que está extendiendo esta tecnología por todo el mundo. "Nos encanta cómo el 'triángulo' de Pavegen está inspirando a los arquitectos y diseñadores urbanos más importantes del mundo" explican desde Pavegen ante este proyecto dubaití.

Las baldosas triangulares de esta empresa ceden ligeramente ante el peso de la persona y activan desde sus esquinas los tres generadores que transforman ese bombeo en electricidad. Este sistema puede generar 3 julios de energía por paso o hasta 5 vatios de potencia mientras alguien camina.

Sus creadores aseguran que será la pista de ciclismo y para corredores más inteligente del mundo. El suelo también está integrado con sensores para proporcionar datos críticos, como el número de pisadas y la cantidad de energía generada en tiempo real. De esta forma, The Loop se convierte en un espacio circular donde la actividad de las personas alimenta los sistemas como el aire acondicionado o la iluminación encargados de hacer más agradable el paseo y animar a los 3 millones de residentes de Dubái a pasear más por su circuito. 

Ocio y agricultura

Se pretende que todos los residentes de Dubái puedan llegar en aproximadamente 20 minutos a cualquier destino de la ciudad andando o en bicicleta. Aún así, no se renuncia a un transporte más masivo y rápido.

Diseño de The Loop URB Omicrono

Bajo esta zona ajardinada se esconden los principales sistemas de reciclaje de agua, generación de energía limpia y el transporte público de la ciudad en forma de hyperloop. Este tipo de transportes de alta velocidad es una de las promesas del futuro y también cuenta con proyectos en España.

Modelos como los que se quieren instalar en Zaragoza pueden alcanzar velocidades de entre 700 y 1.000 km/h en tubos presurizados. No obstante, por ahora son principalmente propuestas sobre el papel, algunas sin llegar a buen puerto.

El proyecto Hiperloop, más famoso, el de Elon Musk con su empresa The Boring Company ha derivado en un aparcamiento para los empleados de SpaceX, desechando todas las promesas hechas en sus inicios. Puede que The Loop termine también en saco roto o puede que en unos años Dubái sea pionero en una serie de anillos verdes que conviertan las ciudades en entornos más paseables.

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