Desde hace años, los coches Tesla con sistemas Autopilot han estado en el punto de mira de las autoridades. Los sistemas de conducción parcialmente autónoma han sido objeto de crítica por muchos, que consideran que no están lo suficientemente preparados como para ofrecer una experiencia de conducción automatizada completa. Un nuevo suceso vuelve a reafirmar estas sospechas, con más de 750 propietarios de coches Tesla sufriendo frenazos en plena carretera sin razón aparente.

Tal y como expone The Guardian, más de 750 propietarios de coches de la firma de Elon Musk se han estado quejando ante los organismos reguladores de seguridad de los Estados Unidos. Explican que los modelos de Tesla equipados con sistemas Autopilot se han estado parando en las carreteras sin justificación en una carta llena de quejas accesible desde la web de la NHTSA.

La Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras ya ha revelado el número de denuncias en una carta de solicitud de información a la empresa automovilística. Esta carta, de 14 páginas y con fecha del 4 de mayo, solicita al fabricante toda la información referente a estos usuarios que han sufrido frenadas involuntarias.

Problemas con coches Tesla

Más concretamente, la Administración está solicitando informes sobre accidentes, muertes, reclamos por daños a la propiedad o lesiones respecto a estos clientes. Además, ha exigido a Tesla información sobre si en estos incidentes los sistemas de conducción Autopilot así como los sistemas de frenado por emergencia automático estaban activados.

Esta carta le da a Tesla hasta el día 20 de junio para proporcionar la información, requerida. En definitiva, la Administración busca investigar las funciones de Autopilot o los controles de crucero adaptativo permiten a estos coches girar o frenar automáticamente en sus carriles, así como averiguar si los sistemas automatizados detectaron obstáculos y si grabaron estos incidentes.

Autopilot Tesla.

La idea es sencilla: buscar todas las posibles relaciones que puedan establecerse entre los sistemas de conducción parcialmente autónoma y estos frenados, para así esclarecer las causas. Esto incluye información sobre reclamos por garantía, las reparaciones resultantes de estos problemas, si se realizaron modificaciones o la información sobre cómo las cámaras incluidas de los coches gestionan los reflejos, las sombras, resplandores o bloqueos debido a condiciones climatológicas.

"Los denunciantes informan que la desaceleración rápida puede ocurrir sin previo aviso y, a menudo, repetidamente durante un solo ciclo de conducción". Además, muchos de los propietarios de los coches Tesla involucrados en estos problemas temieron por accidentes derivados de los mismos, como choques traseros al realizar esos frenados.

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