El avance de la tecnología ha permitido a la industria textil lanzar prendas y materiales de todo tipo, como el tejido de los trajes de los superhéroes o una prenda futurista hecha en España para salir de fiesta pese a la Covid-19. En esta ocasión, unos científicos han diseñado un traje que protege a los surfistas y buceadores de una de las grandes amenazas del océano: el ataque de los tiburones.

En el año 2019 unos científicos de la Universidad Flinders en Australia confirmaron el desarrollo de un material liviano, que algún día podría usarse en trajes de neopreno, resistente a las mordeduras de un tiburón. Una prenda que ya es una realidad y que actualmente se encuentra en busca de financiación en la plataforma Kickstarter, aunque ya superaron el objetivo de los 63.015 euros recaudados.

Un material que los científicos ya habían probado anteriormente en flotadores que llegaron a ser mordidos por grandes tiburones blancos. Se trata de un tejido que está compuesto principalmente de nanofibras de polietileno de ultra alto peso molecular y que sus creadores han diseñado para que se utilice de forma conjunta con el neopreno tradicional de los trajes de buceo.

Aguanta la mordedura

La indumentaria, que se llama Shark Stop Wetsuit, es un traje que es altamente resistente a las mordeduras de los tiburones, tanto a las perforaciones como a los cortes y la abrasión; incluso es un material que tiene una relación resistencia-peso que es un 50% más alto que la del kevlar, material que se usa en los chalecos antibalas, y de 8 a 15 veces más fuerte que el acero.

Así es el diseño del traje. Shark Stop Omicrono

Debajo de la capa de este material hay neopreno orgánico de diferente grosor, ya que depende de si se utiliza el modelo para hacer surf o para bucear, que en este último caso la capa es más gruesa y resistente a las bajas temperaturas. De hecho, sus creadores afirman que no es una prenda más pesada que un traje de neopreno tradicional, aunque sí es más flexible.

Para este traje, los investigadores aplicaron láminas del material a cada lado del neopreno de base biológica y en áreas clave del cuerpo humano donde suelen ocurrir las mordeduras más graves de los tiburones, como puede ser la zona alrededor de la arteria femoral. Un traje que no es impenetrable, pero cuya tecnología del tejido impide que los dientes de estos animales desgarren a la víctima, según sus creadores.

Sobrevivir a los ataques

En la actual campaña de financiación, el traje de neopreno está disponible en modelos específicos para hacer surf y buceo, y en grosores que van desde los 2 a los 7 milímetros. Una prenda que también cuenta con un bolsillo en el muslo para guardar las llaves, rodilleras, parches en los hombros y codos, y una cremallera de acero inoxidable.

Un traje que, según sus propios creadores, podría permitir que una persona atacada por un tiburón sobreviva. El Shark Stop Wetsuit, en caso de cumplir su objetivo de crowdfunding y comenzar su producción, tendrá un coste de 795 dólares australianos, que al cambio son aproximadamente unos 498 euros.

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