Los besos de perro, o simples lametones, pueden parecer algo antihigiénico pero es una practica más común de lo que pensamos.

Nuestras mascotas tienen diferentes formas de mostrar su cariño, y en demasiadas ocasiones los tratamos como si fuesen casi humanos. Sin embargo, no lo son, siguen siendo animales y con una serie de microorganismos asociados a ellos que no tenemos en cuenta. Un claro ejemplo es que un simple arañazo o mordisco casual de nuestra querida mascota, aunque sea sin querer, puede causarnos una infección grave.

Pero, ¿y los besos de perro? Sí, son una forma común por parte de nuestro amigo de cuatro patas de saludarnos y/o expresarnos su cariño. Pero eso no significa que debamos permitirlos, y mucho menos creer que son una tontería sin más. Pueden ser algo realmente peligroso, como lo que le sucedió a una mujer de Reino Unido.

La mujer que casi muere por recibir besos de perro

Según podemos leer en el British Medical Journal Case Reports, recientemente se ha producido un “extraño” caso en Reino Unido relacionado con los “besos de perro“. Y es que una mujer de 70 años de edad ha acabado en el hospital tras empezar a presentar síntomas neurológicos, como arrastras las palabras mientras hablaba por teléfono, o desmayarse mientras estaba sentada en la silla.

En un inicio parecía que la mujer había presentado un ataque de epilepsia, según creían sus médicos, ya que tenía registrado en su historia clínica que padecía de esta dolencia. Ya en el hospital parecía estar mejorando poco a poco, pero al cuarto día de ingreso, volvió a empeorar: La mujer sufría dolor de cabeza, fiebre elevada, escalofríos y diarrea, además de sufrir un daño agudo en sus riñones.

Con todo esto, la mujer acabó ingresada en la unidad de cuidados intensivos por sufrir una sepsis grave (una complicación potencialmente mortal debida a una infección que ha llegado a la sangre).

Besos de perro: Una causa potencial de infección

Los análisis de sangre realizados a la mujer revelaron la causa de la infección casi mortal: La bacteria Capnocytophaga canimorsus, un tipo de microorganismo que vive en la boca de perros y gatos, y que suele dar infecciones a causa de mordeduras o arañazos de estas mascotas. Pero, hay una causa más conocida: Los besos de perro o lametones.

Capnocytophaga_canimorsus

Y esta última fue la causa del mal de la mujer, ya que no tenía signos de arañazos ni mordeduras, pero sí admitió que tenía un trato muy cercano con su perro al que permitía que le lamiera.

Según los investigadores, este caso pone de relieve varias cosas: En primer lugar, que la infección por C. canimorsus puede darse sin una herida abierta de por medio (arañazos o mordeduras); en segundo lugar, nos recuerda que las personas mayores son más propensas a las infecciones (posiblemente por tener un sistema inmune envejecido): y, finalmente, a pesar de que es raro que esta bacteria provoque una sepsis grave, hasta una cuarta parte de los casos de infección por C. canimorsus han demostrado poder causar esta complicación potencialmente mortal.

Finalmente, la mujer volvió a su casa tras ser tratada con antibióticos en el hospital durante un mes.