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¿Por qué los perros dan vueltas sobre sí mismos antes de acostarse?

7 febrero, 2016 12:04

Los perros son animales bastante peculiares, aunque no podemos negar que los gatos lo son aún más (¿a quién se le ocurriría adorar a una caja sobre todas las cosas?). Si sois propietarios de uno o más compañeros peludos de cuatro patas, probablemente en más de una ocasión habréis visto como se dirigen a su lugar típico de descanso y empiezan a dar vueltas sobre sí mismos, ¿verdad?

No tiene sentido alguno, al menos no para nosotros, pues probablemente los perros acabarán acostándose exactamente en el mismo sitio que siempre y prácticamente en la misma posición que siempre. Ahora bien, ¿tiene explicación biológica?

Los perros: ¿Manías o comportamiento de supervivencia?

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Como comentaba, lo típico es que nuestros perros empiecen a dar vueltas sobre sí mismos previamente a echar una siesta o acostarse por la noche. Este comportamiento no es una “manía”, sino que tiene raíces biológicas, concretamente subyacentes a tiempos prehístoricos: En su día, los antepasados de los perros necesitaban hacerse la cama cada vez que dormían, y no lo tenían todo preparado como hoy en día.

Si bien es cierto que los perros se han adaptado a vivir con los seres humanos tras su domesticación hace miles de años, estos animales aún hoy en día conservan costumbres arraigadas genéticamente de sus antepasados más salvajes, los cuales dependían de su instinto para sobrevivir

Los antepasados de los perros no tenían almohadas ni cojines

Obviamente hace miles de años, los antepasados de nuestros amigos de cuatro patas no poseían ni camas, ni mantas ni almohadas. Los antepasados de los perros necesitaban palpar la hierba alta y la maleza previamente a organizarse una cama propia cómoda y tener allí a sus crías a su cargo.

Para llevar a cabo esto, lo más fácil para ellos era simplemente dar vueltas sobre sí mismos, haciendo círculos, un ritual cuyo objetivo era aplastar hierbas o nieve y detectar si había animales cercanos como serpientes o insectos de gran tamaño.

Finalmente, según indican algunos expertos, este ritual de círculos también implicaría no solo crear una zona de descanso y ahuyentar a posibles depredadores, sino marcar territorio: Los otros perros sabrían que ese territorio ya ha sido reclamado.

Vía | LiveScience..