La idea de un campo de fuerza no es tan lejana como parece, o al menos eso es lo que pretende Boeing.

La última patente publicada del fabricante apunta en esa dirección. Se llama “Método y sistema para atenuación de onda de choque por arco electromagnético”, y es tan futurista como suena.

Eso si, este sistema, diseñando para vehículos militares como transporte de soldados, no protege contra impactos de bala u otros objetos físicos, sino que es una solución contra las ondas de choque de impactos cercanos, como por ejemplo misiles o bombas que caigan cerca.

La patente para crear un campo de fuerza

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Para conseguirlo el sistema parte de un sensor que detecta la onda de choque que se conecta a un generador de arco electromagnético, que ioniza la zona afectada del vehículo creando un campo de plasma que intercepta la onda de choque y la atenúa antes de llegar a los ocupantes.

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Si te has quedado igual que antes, básicamente este dispositivo modificaría la densidad y temperatura del aire para que actuase como escudo contra la onda de choque. Sin embargo no sería como en las películas en las que este tipo de campos de fuerza se mantienen durante varios minutos, sino que sería un proceso instantáneo, activado de manera precisa justo cuando ocurriese el impacto.

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La cantidad de energía necesaria para formar ese campo protector sería inmensa, y ese es el gran problema al que seguramente se enfrentan ahora mismo los investigadores de Boeing. Además, este tipo de campos de plasma no sólo serían mortales para los propios ocupantes del vehículo, sino que también podrían bloquear incluso la luz, cegándolos momentáneamente.

Como siempre, esto es sólo una patente y de aquí a que se haga realidad aún falta mucho, pero este ya es un paso más para hacer realidad la guerra del futuro que tanto nos hemos imaginado.

Fuente | USPTO