El Air Force One, uno de los aviones mas conocidos en todo el mundo, está a punto de ser renovado una vez mas. El nuevo Air Force One será un avión moderno pero en línea con los anteriores.

Air Force One es el nombre otorgado al avión que transporta al presidente de los Estados Unidos en sus viajes oficiales alrededor de todo el mundo. A una persona con tanto poder y responsabilidad no le basta con un avión privado cualquiera, ya que nunca viaja solo: tiene que llevar consigo a todo un ejército de guardaespaldas, ayudantes y periodistas. Además, si nos creemos las películas de Hollywood, también tiene que tener sitio para que el presidente luche mano a mano contra terroristas. El modelo actual que cumple estas funciones desde 1990 es una versión modificada del Boeing 747-200B.

El nuevo Air Force One es el último de su especie

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Ahora la fuerza aérea estadounidense ha anunciado que el próximo Air Force One será el Boeing 747-8, un avión de pasajeros de fuselaje ancho que supone ya la cuarta generación del reconocido 747. Por supuesto aunque la base será la misma que el 747-8 que podemos ver ya en aeropuertos de todo el mundo, será modificado en prácticamente todos los aspectos, especialmente su interior. Como en todas las del gobierno, esta es una decisión muy política que tiene en cuenta mas aspectos aparte de las características del avión.

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Y es que recientemente Boeing anunció que reducía el ritmo de producción del 747-8, desde 1.5 unidades al mes a 1.3 unidades al mes, todo por culpa de una demanda reducida que no cumplió las expectativas de la compañía. El otro modelo contemplado por la fuerza aérea estadounidense fue el Airbus A380, pero tiene algo en su contra: se fabrica en Francia. En cambio el 747-8 se fabrica en el estado de Washington, por lo que es una mejor elección desde el punto de vista político por el orgullo patrio del que suelen aprovecharse los políticos del país.

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Esto no significa que la única razón para elegir el 747-8 sea su lugar de fabricación, y seguro que cumple las expectativas de la fuerza aérea, encargada de proteger al presidente cuando está en el aire, pero es un indicativo de cómo funcionan las cosas. Además, en el propio anuncio oficial se recalca que el contrato no está cerrado y que aún quedan detalles pendientes como el coste de las modificaciones.

Sea como sea, todo apunta a que este será el último Air Force One de su tipo, ya que la producción de este tipo de “jumbos” de cuatro motores es cada vez menor, siendo sustituidos por otros de dos motores.