El negocio de los tatuajes mueve millones de euros por todo el mundo, aunque pueda parecer una tontería a los ajenos al mundillo, y cada día va creciendo más, así que no es de extrañar que se vaya mejorando las técnicas y los materiales en el negocio. Es más, a unos estudiantes franceses se les ha ocurrido la locura de convertir una impresora 3D en una máquina de tatuar automática basándose en la conocida Makerbot Replicator 3D, y lo mejor es que lo han conseguido con éxito.

Todo esto surge a raíz de un evento del Ministerio de Cultura francés llamado “Public Domain Remix”, en el que se les dio ocho horas a un grupo de estudiantes para que hicieran con el dispositivo electrónico de su elección lo que literalmente quisieran. Los estudiantes se dividieron en varios grupos que empezaron a sacar ideas por su cuenta, y a uno de ellos se les ocurrió hacer una máquina de tatuado automático asistido por ordenador, cogiendo una Makerbot Replicator 3D que tenían por allí.

Para hacerlo simplemente cambiaron el extrusor de la impresora 3D con un bolígrafo, de tal forma que la impresora dibujaba sobre la piel como si se tratara de un tatuaje. Pero el equipo no se contentó con esto, porque viendo que esto funcionaba decidieron cambiar el bolígrafo por una máquina real para tatuar. Probaron en piel artificial para comprobar que funcionaba, y para confirmarlo no faltaron voluntarios con ganas de ser los primeros en ser tatuados por una máquina.

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Si tenéis ganas de haceros una por vosotros mismos, los chavales han dejado las instrucciones necesarias para montar nuestra propia máquina en Instructables junto con una buena cantidad de fotografías y detalles del proceso. ¿Queréis ser de los primeros en haceros un tatuaje con una impresora 3D?

Fuente | 3DPrint