Ayer, después de las habituales rondas de rumores y filtraciones, finalmente fue anunciado el Nexus 5. Cada nueva generación de smartphone Nexus se ha convertido en el dispositivo mas deseado por los usuarios de Android, ya que conforma una especie de “estándar”, un dispositivo casi ideal que representa lo que debería ofrecer cualquier dispositivo con el sistema de Google.

Hay varias razones por las que un dispositivo como el Nexus 5 existe. Para empezar, fomenta la competitividad, por raro que suene. Los fabricantes de dispositivos Android saben que no se pueden dormir en los laureles, que no pueden lanzar dispositivos que simplemente sean “suficientemente buenos”. Al ofrecer una gran relación calidad/precio, el Nexus 5 en la actualidad es el dispositivo a vencer, y durante el próximo año veremos a compañías como Samsung, Sony o la propia LG lanzando nuevos modelos que sean superiores al menos en alguno de los apartados. Es algo que Microsoft también quiso hacer con el lanzamiento de las tablets Surface: encender el mercado; en su caso no funcionó en la primera generación, pero en la segunda ya se ven mas apuestas por parte de otros fabricantes.

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Otra razón de existencia del Nexus 5 es la de servir de escaparate del nuevo sistema operativo de Google, Android 4.4. Por ejemplo, la posibilidad de controlar el dispositivo con la voz diciendo en voz alta “Ok, Google” es una novedad de KitKat que es seguro que irá apareciendo en todos los modelos en el futuro. Lo que está claro es que el objetivo de los Nexus nunca ha sido vender muchas unidades.

Sin embargo, ¿realmente es necesario un Nexus 5 para cumplir esos objetivos? La respuesta es que no, y menos aún si cuentas con un fabricante como Motorola bajo tu control. Muchos pronosticaron que la compra de Motorola serviría para que Google empezase a fabricar sus propios smartphones, pero eso fue rápidamente descartado por la injusta ventaja que le daría respecto a otros fabricantes. Aunque, ¿y si realmente eso ya estuviese pasando? Porque el Motorola Moto X bien podría haberse llamado Nexus 5 y nadie se hubiera quejado: fue el primer dispositivo que presentó novedades que luego han disfrutado otros, como el mencionado control por voz.

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Entre eso y el aumento constante de calidad por parte de la mayoría de los fabricantes del sector, cabe preguntarse si tiene sentido seguir lanzando dispositivos Nexus. Directivos de Google ya han declarado en otras ocasiones que, aunque la marca Nexus continuará, su futuro aún no está claro: es un concepto ideado con un objetivo muy claro, y una vez que se ha cumplido no hay ningún motivo para continuarlo.