Siendo Tesla una de las firmas automovilísticas líderes en lo que a conducción autónoma se refiere tanto en España como en el resto del mundo, es lógico pensar que esta tecnología está fuertemente protegida para que otras compañías no descubran sus secretos más importantes. Y unos investigadores holandeses podrían haberlos descubierto.

Según informa Reuters, un equipo de investigadores forenses ha conseguido hackear el sistema de almacenamiento de datos de conducción de Tesla. De esta forma, han logrado el acceso a la información registrada de conducción de Autopilot, vital para la investigación de accidentes automovilísticos relacionados con esta tecnología.

Los investigadores holandeses del Instituto Forense de los Países Bajos no solo descubrieron que los coches de Tesla registraban información sobre el comportamiento de la conducción de sus coches. Además, el nivel de profundidad de estos datos era mucho mayor, incluyendo incluso detalles como la posición del pedal, el ángulo del volante o el uso de los frenos.

Hackean a Autopilot

Autopilot de Tesla

Lo cierto es que este descubrimiento fue casi por accidente. El equipo se encontraba investigando precisamente un accidente que involucraba a un Tesla que estaba haciendo uso del Autopilot. Este se había chocado con otro al frenar de forma inesperada, provocando el siniestro. Los investigadores, en vez de buscar datos de Tesla, decidieron aplicar ingeniería inversa a los registros de los datos que Tesla realiza.

Según Francis Hoogendijk, investigador digital del Instituto, los datos que encontraron "contienen una gran cantidad de información para investigadores forenses y analistas de accidentes de tráfico". Datos que según el equipo, podrían estar almacenándose en los coches hasta un año completo.

Un Tesla en Autopilot James Locke | YouTube Omicrono

Tanto Hoogendijk como el equipo denuncian que aunque Tesla había estado proporcionando datos a los gobiernos involucrados que querían investigar estos accidentes, la empresa se guardó muchísimos detalles importantes. Detalles que, según el equipo, serían útiles para conseguir más conocimiento de estos coches (sobre todo por el hecho de que registran información como cualquier dispositivo electrónico actual).

Secreto de industria

Y es que Tesla cifra sus datos por motivos de secretismo industrial, para evitar que la competencia pueda descifrar las cuestiones más sensibles del Autopilot. Es cierto que los propietarios de los coches de la firma de Elon Musk pueden solicitar estos datos, incluyendo los más privados como las imágenes de la cámara interna.

De hecho, el propio Autopilot tiene un sistema para que la empresa recopile datos estadísticos que recojan falsos positivos y falsos negativos. En este modo, el Autopilot no toma ninguna ación, pero registra cuándo se habría tomado una acción. Así, el equipo de ingeniería de Tesla es capaz de dilucidar si el Autopilot podría haber evitado choques y así poder realizar ajustes en dicha tecnología.

Tesla, por el momento, no se ha pronunciado al respecto. No obstante, este suceso podría poner en pie de guerra a la firma y a los gobiernos que consideren necesario que esa información sea pública para esclarecer los hechos de los accidentes que involucran a la conducción autónoma de Elon Musk.

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