Cuando tienes un problema en algún dispositivo electrónico, lo más probable es que lo primero que hagas sea apagarlo y encenderlo. Por inercia es un comodín con el que podemos solucionar cualquier error. Lo hacemos en la TV, en el ordenador, y en casi cualquier otro dispositivo. Y realmente funciona, o al menos en la mayoría de los casos.

No obstante, cuando se trata del router, no solemos aplicar esta solución, o al menos todos ¿No funcionaría en este caso, o es que simplemente no se nos ocurre? Los routers, aunque estemos constantemente manipulándolos, pueden sufrir bastantes errores.

Lo cierto es que técnicamente un router es exactamente igual que un ordenador. De hecho, un router es un ordenador. Tiene una CPU, memoria RAM, almacenamiento y un sistema operativo (un firmware, más bien). Además, debemos tener en cuenta que en ocasiones pasa durante meses sin desconectarse.

Puede parecer baladí, pero reiniciar el router eventualmente es muy importante

Y cada uno de estos componentes puede provocar errores: la CPU puede sobrecalentarse; la RAM puede necesitar una limpieza, lo que puede provocar una ralentización en la velocidad, o incluso un error interno puede hacer que el firmware del router se caiga sin poder recuperarse (lo que se conoce como ‘kernel panic‘).

No solo basta con reiniciar el router

Como haríamos en un ordenador o en una TV, reiniciar no soluciona errores persistentes en el tiempo, sino que más bien es una solución pensada para solucionar un error eventual, como los mencionados anteriormente. También hay otros errores muy comunes que no son provocados directamente por el hardware o por el software, como conflictos a la hora de administras las IP públicas y privadas.

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Pero reiniciar no es suficiente. Si atendemos al servicio técnico cuando llamamos por teléfono para solucionar cualquier error, el teleoperador robótico siempre nos pide lo mismo: que reiniciemos el router, además de dejar 10 segundos de descanso hasta que lo volvamos a encender. Pero, ¿para qué son estos 10 segundos? ¿Realmente son necesarios?

Los cargadores de portátil, por ejemplo, cuando los desenchufas de la red eléctrica, tardan unos segundos en que apagarse del todo. Y lo puedes comprobar gracias a la luz LED. Con los televisores pasa lo mismo. Evidentemente, con los routers también. Y ahí está el porqué debemos desconectarlo al menos por 10 segundos.

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Si no esperas mínimo 10 segundos, probablemente algunos componentes no se reinicien por completo

Esto de que se quede encendido aún estando desconectado de la toma de corriente es por los condensadores de los dispositivos electrónicos. Los condensadores se cargan con energía y, una vez dejan de recibir energía, tardan en liberarse por completo. Podríamos decir que son como unas baterías pequeñas (tomado esto último con pinzas).