Es algo que todo el mundo sospechaba pero de lo que hasta ahora no había pruebas: Google favoreció sus servicios, y lo hace perjudicando a otros que podrían ser más relevantes para el usuario.

Un informe de la FTC (La comisión federal de comercio de los EEUU) creado hace dos años revela esta práctica al detalle, gracias a una investigación de 19 meses de duración en la que se examinaron millones de documentos y se oyeron varias horas de testimonios.

Pese a todo ese trabajo, finalmente la FTC decidió no tomar ninguna medida contra Google después de recibir una “promesa” de que dejaría de hacerlo. Pero ahora ese informe se ha hecho público, y lo que desvela puede hacer mucho daño a la compañía e influenciar batallas con los legisladores de todo el mundo.

La base de todo estaba en un algoritmo que modificaba los resultados de búsqueda dependiendo de los productos de Google relacionados con los términos a buscar. En teoría los resultados que aparecen primero en la búsqueda de Google son los más relevantes, pero eso no siempre fue así.

Google favoreció sus servicios por encima de la competencia

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Este algoritmo determinaba qué producto de Google se ajustaba mejor al término de búsqueda introducido por el usuario; un servicio que de otra manera hubiese quedado enterrado entre el resto de alternativas de esta forma acababa en los primeros puestos. Por ejemplo, si un usuario buscaba restaurantes en vez de ofrecerle enlaces a Yelp, primero mostraba enlaces a Google Local, un servicio mucho menos popular.

Esto servía especialmente para servicios nuevos, que por su juventud estarían condenados a las profundidades de la búsqueda de Google. De hecho, aunque Google supuestamente realizó cambios al algoritmo después de este informe, la cosa no cambió mucho ya que había conseguido lo que quería, que estos nuevos servicios consiguiesen estar en los primeros puestos por si solos.

La amenaza europea

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Aunque en EEUU no tuvo muchos problemas por esto, en Europa la Unión Europea le está poniendo las cosas más crudas a Google. Incluso hace unos meses se llegó a plantear la posibilidad de separar la búsqueda de Google del resto de la compañía, precisamente por las sospechas de competencia desleal al fomentar el uso de sus propios servicios por encima de las alternativas.

¿Realmente es para tanto?

Esa es una pregunta que responderá de manera diferente cada persona. Desde el punto de vista de un legislador, es posible que lo que hace Google sea competencia desleal. Por otra parte, no es seguro que la Google actual continúe con estas prácticas y sólo una nueva investigación a fondo lo revelaría.

Por una parte Google es una empresa privada y por lo tanto tiene sentido que quiera promocionar sus productos; pero por otra cuando un usuario de su búsqueda no recibe los mejores resultados para él sino para la empresa Google está fallando estrepitosamente en el servicio que supuestamente proporciona.