Las piezas de Phantom Chess se mueven solas

Las piezas de Phantom Chess se mueven solas Phantom Chessboard Omicrono

Hardware

El primer ajedrez robótico del mundo fabricado en madera: permite jugar en solitario o contra rivales de Chess.com

Phantom Chess cuenta con sofisticados motores de accionamiento magnético que mueven las piezas de forma fluida y silenciosa.

Más información: ChessUp, el tablero de ajedrez inteligente que te enseña a ganar con las mejores jugadas

Publicada

El ajedrez es uno de los juegos más antiguos del mundo. Todavía se desconoce con precisión su verdadero origen, pero las teorías más aceptadas apuntan a la India y el siglo VI. Desde entonces, la fiebre por los escaques y las 32 piezas no ha cesado de aumentar, amplificada en los últimos años gracias a Internet.

Buscando precisamente esa unión entre lo analógico y lo digital, la tradición artesanal y la vanguardia tecnológica, los responsables de Phantom Chess han querido marcar un antes y un después en cuanto a los tableros con piezas automatizadas.

Creado por la empresa india Phantom Robotics, es el primer tablero robótico del mundo fabricado íntegramente en madera maciza, con versiones en nogal y arce, ofreciendo una experiencia tan estética como funcional.

El secreto de Phantom reside en sus sofisticados motores internos de accionamiento magnético. Gracias a una malla de sensores de alta precisión y actuadores lineales ultrasilenciosos (por debajo de los 18 dB), las piezas se mueven con una suavidad casi imperceptible, sin exponer ningún componente mecánico.

Toda la tecnología, desde los imanes y los sensores de posición hasta la guía de movimiento y el sistema de control, está oculta bajo una delgada capa de madera tratada, lo que le permite conservar la apariencia de un tablero tradicional.

Este diseño minimalista se apoya en una arquitectura en capas patentada, que integra tanto el hardware de detección como el sistema de movimiento. Así, Phantom convierte el propio tablero en una interfaz inteligente, sin pantallas ni cables visibles, diferenciándose de los tableros electrónicos clásicos.

La conexión se realiza mediante Bluetooth o Wi-Fi, y basta con un único proceso de emparejamiento para que el usuario empiece a jugar. Otro de sus atractivos es la plataforma digital conectada. A través de su aplicación móvil, Phantom Chess se sincroniza en tiempo real con Lichess y Chess.com, dos de las principales plataformas online de ajedrez, permitiendo jugar partidas a distancia en un tablero físico que reproduce cada movimiento.

Una partida de Phantom Chess frente a la IA Stockfish

También ofrece la posibilidad de enfrentarse a motores de inteligencia artificial, como Stockfish o Maia, un modelo neuronal entrenado para imitar los errores y decisiones humanas.

Además, el llamado Modo Escultura permite reproducir partidas históricas o secuencias de entrenamiento personal, 'representadas' por el tablero con movimientos automáticos de las piezas, como si se tratara de una coreografía mecánica.

Phantom Robotics cuenta con cuatro patentes internacionales en trámite, que abarcan el sistema de detección magnética, el diseño ultrasilencioso de los actuadores o la infraestructura de software que integra las partidas online con los movimientos físicos del tablero.

Aun así, las primeras unidades de producción ya están a la venta en su página web con distintos kits: desde la versión básica de unos 800 dólares (680 euros al cambio actual), que incluye el tablero y las piezas, hasta una versión de lujo que supera los 1.200 dólares (1.020 euros) y se acompaña de una mesa de exposición fabricada a medida.