
La esfera del nuevo Casio Edifice EFK-100 y su trasera transparente. Omicrono
La sorpresa de Casio: el más clásico de los relojes digitales lanza su primer modelo con movimiento automático
La marca japonesa venderá a partir de agosto el nuevo Casio Edifice EFK-100, con reserva de marcha de 40 horas y una caja transparente.
Más información: Los nuevos relojes de Casio son casi indestructibles y tienen una batería que te durará más de 10 años
Desde sus icónicos relojes-calculadora hasta la robustez de la línea G-Shock, Casio ha cimentado su reputación en la tecnología electrónica. Ahora, con el lanzamiento del nuevo Casio Edifice EFK-100, ha sorprendido a todos con su primer reloj con movimiento automático mecánico, terreno dominado por la tradición relojera suiza y japonesa de alta gama.
Tradicionalmente, la serie Edifice de la marca nipona se ha centrado en cronógrafos de cuarzo con funciones avanzadas y diseños inspirados en el automovilismo. Con el EFK-100, Casio se inclina hacia la relojería tradicional, ofreciendo una experiencia más 'purista' a sus usuarios.
Este nuevo modelo alberga un movimiento mecánico basado en el calibre NH35 de Seiko reconocido por su fiabilidad y durabilidad. Opera a una frecuencia de 21.600 alternancias por hora (3 Hz), lo que garantiza un movimiento fluido del segundero.
Ofrece una reserva de marcha de aproximadamente 40 horas, lo que significa que el reloj seguirá funcionando durante casi dos días sin necesidad de usarlo o darle cuerda. Además, cuenta con función de remonte manual y parada de segundero, características muy apreciadas por los aficionados.
El diseño del EFK-100 se mantiene fiel a la estética deportiva y elegante de la línea Edifice. La caja, fabricada en acero inoxidable, tiene unas dimensiones de 39 mm de diámetro y 12,5 mm de grosor, con una distancia de asa a asa de 43,5 mm.

Los colores de las esferas del Edifice EFK-100 Omicrono
La esfera es uno de sus puntos más atractivos gracias a la técnica del electroformado, que le otorga un aspecto único y distintivo a cada reloj simulando el carbono forjado con un patrón irrepetible.
El reloj está protegido por un cristal de zafiro, un material altamente resistente a los arañazos, lo que asegura la durabilidad y claridad durante muchos años. En cuanto a la resistencia al agua, las especificaciones la sitúan en 100 metros (10 bares), lo que lo hace adecuado para ducharse con él o nadar, aunque no está diseñado específicamente para el buceo.
Uno de los mejores detalles es el fondo de la caja atornillada, totalmente transparente, que permite observar el movimiento mecánico y los engranajes en funcionamiento, como si fuera una ventana al corazón del reloj mientras late.
El Casio Edifice EFK-100 estará disponible a partir del mes de agosto con variantes en verde, azul y blanco. Los precios varían según la versión, con modelos en acero y brazalete metálico por 279 euros. Para los más exquisitos, también hay una edición limitada en negro, con caja y esfera de carbono forjado y correa de uretano ultrasuave: una edición limitada con un precio de 449 euros.