
Trayectoria del cohete Falcon 9 en la misión Bandwagon-3 Omicrono
SpaceX lanza con éxito la misión Bandwagon-3 con tres cargas a bordo: una de ellas es la cápsula europea Phoenix 1
De las tres cargas útiles desplegadas al espacio, destaca la cápsula europea privada Phoenix cuyo objetivo es probar una reentrada en la atmósfera.
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Menos de 24 horas después del lanzamiento de la misión europea ACES, otro cohete Falcon 9 de SpaceX ha alzado el vuelo en una misión con múltiples clientes. Hasta tres cargas útiles ha desplegado este vehículo espacial reutilizado de la compañía fundada por Elon Musk. Se trata de la misión Bandwagon-3, un viaje compartido por diferentes empresas y proyectos internacionales como la cápsula europea Phoenix que tiene como objetivo intentar un reingreso espacial con un escudo inflable.
SpaceX ha vuelto a demostrar su alta capacidad de lanzamiento. No solo por la cercanía con el anterior despegue realizado este lunes, sino por integrar en un mismo lanzamiento varios encargos procedentes de todo el mundo. Hasta ahora, ninguna otra empresa privada ha alcanzado un ritmo de despegues similar.
El despegue se ha realizado según el plan establecido, a las 8:48 p.m. EDT de este lunes, lo que equivale a las 2:48 horas de la noche de este martes en el horario peninsular de España. Ocho minutos después del despegue, el propulsor de la primera etapa, el B1090, ha regresado a Tierra en Cabo Cañaveral.

Despegue de la misión Bandwagon-3 Omicrono
Es el tercer vuelo en el que se utiliza este propulsor, una demostración de la resistencia conseguida por la empresa, aunque otros propulsores se han reutilizado más veces. Anteriormente se había usado en las misiones O3b mPOWER-E y Crew-10, esta última dio el relevo a la tripulación de la cápsula Starliner de Blue Origin.
Tres misiones en una
A bordo de esta misión se encontraban el 425Sat-3 de ADD, el Tomorrow-S7 de Tomorrow Companies Inc. y la cápsula de reentrada PHOENIX de Atmos Space Cargo. Cada una tiene un objetivo propio, desde la vigilancia militar, pasando por la observación meteorológica y la tecnología de reentrada espacial. Este modelo de negocio creado por SpaceX da la oportunidad a empresas y agencias de todo el mundo de desplegar sus inventos y satélites espaciales sin tener que afrontar el coste que supone un cohete privado para su misión.
Para empezar, el proyecto Korea 425 firma el 425Sat-3, un satélite de radar de apertura sintética (SAR). Su objetivo es fortalecer las capacidades de observación militares a Corea del Sur. Operará en una órbita baja (LEO) a 525 kilómetros. Se ha desarrollado en conjunto por Korea Aerospace Industries (KAI), Thales Alenia Space y Hanwha Systems y forma parte de una constelación con otros satélites lanzados en años anteriores.
En segundo lugar, la misión Tomorrow-S7 utiliza un CubeSat 6U, un pequeño satélite que trabajará durante tres años ofreciendo información sobre temperatura y humedad para mejorar los pronósticos climáticos. Aunque, es la tercera misión la que despierta más interés.

Cápsula Phoenix Omicrono
La empresa alemana Atmos Space Cargo es la responsable de Phoenix, una cápsula diseñada para intentar un reingreso espacial. Recibió la autorización de la Administración Federal de Aviación (FAA) de Estados Unidos en el mes de enero. Su objetivo es probar un escudo térmico inflable durante un viaje de dos vueltas alrededor de la Tierra y después reingresar a la atmósfera. Un avión equipado con un terminal satelital móvil seguirá la cápsula en su descenso.
Los datos que se recopilen en este viaje servirán para mejorar el desarrollo de la futura cápsula Phoenix 2 prevista para 2026. Del desarrollo de tecnologías como esta dependen muchas misiones futuras que pretenden viajar fuera de la Tierra y después regresar en las mejores condiciones, igual que ocurre con los cohetes reutilizables de SpaceX.