
Montaje con aviones, cazas y fragatas y el logo de la OTAN
EEUU controla la conexión cifrada en misiones conjuntas de la OTAN de 121 cazas españoles y de cinco fragatas
El Link 16 es un sistema crítico para las Fuerzas Armadas al permitir comunicaciones cifradas y es el estándar usado en los cazas patrios.
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La desconfianza generada por la Administración de Donald Trump en Europa ya ha hecho saltar todas las alarmas en los países que operan el caza F-35, entre los que no está España. Una serie de servicios esenciales para la operación del caza dependen directamente de Estados Unidos y podrían deshabilitarlos de forma unilateral, dejándolos inservibles para un escenario de guerra.
Si bien las Fuerzas Armadas españolas no se encuentran en esa situación tan delicada con el caza, sí existen otros ámbitos críticos en los que EEUU tiene la llave maestra. Este es el caso del sistema de comunicaciones seguras Link 16, un protocolo impulsado por la OTAN cuya dependencia de Washington D.C. es total en algunos situaciones. Y sin la que los aliados verían mermada su capacidad de transmisión de información esencial para la seguridad nacional.
España emplea actualmente este estándar de comunicaciones seguras en algunas de sus plataformas más avanzadas, como el caza Eurofighter Typhoon, el avión de transporte A400M, sistema antiaéreo Patriot o las fragatas F-100 Álvaro de Bazán. La ventaja del Link 16 es que permite compartir todo tipo de datos entre las plataformas desplegadas de forma automática y finamente integrada con los sistemas de guerra.

Fragata F-103 Blas de Lezo, una de las embarcaciones con Link 16 de España
Esta información puede ser, por ejemplo, la posición de los objetivos o la monitorización de las potenciales amenazas. "De manera que, al final de la compartición, permite que todos los aliados que participan en la operación conozcan la foto global sobre la que se está trabajando", explica Francisco Delgado director general de ingeniería, productos y mercados de Grupo Oesía, a EL ESPAÑOL-Omicrono.
"Esa capacidad, además de que se realiza en tiempo real, está muy orientada a la propia operación", continúa el experto. "Es decir, no sólo se intercambian los contactos que hay ahí, sino que te permite coordinarte con las diferentes plataformas". Además de la detección de potenciales amenazas, también se lleva a cabo la fase de evaluación para saber si es real y la de organización táctica para neutralizarla.
En todos los Eurofighter
El carácter multiplataforma y multimedio del Link 16 hace que las Fuerzas Armadas españolas tengan varios sistemas operativos con este método de comunicación integrado. Por número de unidades, la plataforma más representativa con esta capacidad son los cazas Eurofighter.
Este modelo de aeronave es la espina dorsal de la capacidad aérea de ataque de España y la apuesta del Ministerio de Defensa por ella es plena. El pasado diciembre, Margarita Robles formalizó la adquisición de una segunda remesa de 25 unidades de Eurofighter dentro del programa Halcón II, por un valor de unos 4.000 millones de euros.

Eurofighter Halcón II de Airbus. Omicrono
Con esta adquisición más los 20 cazas del mismo modelo adquiridos un año antes como parte del Halcón I, el Ejército del Aire y del Espacio pretende ir sustituyendo de forma paulatina los cazas F-18 en la flota activa. Dentro de este modelo, de factura estadounidense y dotados igualmente del sistema Link 16, los primeros en retirarse serán los basados en Gando (Gran Canaria), ya que se encuentran al final de su vida útil. Les seguirán los emplazados actualmente en Torrejón de Ardoz (Madrid).
Por el momento y sin que se haya comunicado nada de forma oficial, España hace all in al caza Eurofighter. Se trata de una apuesta que se aleja del esquema tradicional de tener, al menos, dos modelos de cazas en servicio por si uno de ellos tiene que quedarse en tierra por la detección de algún fallo. El Ejército del Aire y del Espacio tiene actualmente activos 68 Eurofighter y 69 cazas F-18, según World Air Forces.
De estos, el sistema Link 16 se encuentra en la totalidad de los cazas Eurofighter que dispone el Ejército del Aire y el Espacio y en la mayoría de los cazas F-18 en activo, salvo en las 16 unidades operativas en la base de las Islas Canarias.
Continuando con la rama aérea, el otro pilar del Link 16 español es el avión de transporte A400M. Este modelo de aeronave, ensamblada por Airbus en Sevilla, es una de las piezas clave en la estrategia logística de las Fuerzas Armadas españolas. El número de aviones de este tipo en el Ejército español es de 14 unidades más otras 13 pedidas.

Lanzamiento de misil Patriot
La afectación de una posible anulación del Link 16 afecta también a unidades del Ejército de Tierra. En concreto, al sistema de defensa aérea Patriot como el que Defensa tiene desplegado en Turquía desde hace años y que Defensa pretende actualizar al último estándar tecnológico.
En cuanto a la rama naval, la Armada emplea el Link 16 a bordo de las fragatas clase F-100, diseñadas y construidas por Navantia en Ferrol (A Coruña). En este caso, se integra dentro del sistema de combate Aegis de Lockheed Martin, una suite de guerra que muy pocos países en el mundo tienen y que eleva las embarcaciones. Los futuros helicópteros navales MH-60R también equiparán este sistema, se espera que la Armada reciba las primeras unidades este mismo 2025.
La llave de EEUU
El estándar Link 16 comenzó a desarrollarse a mediados de los años 70 en Estados Unidos para reemplazar a los antiguos Link 11 y Link 4 que, hasta ese momento, eran los medios de cabecera para la Marina y la Fuerza Aérea del país norteamericano. Ya en los 90, las primeras plataformas estadounidenses comenzaron a incorporar los sistemas necesarios para poder utilizarlo y, a principios de los 2000, el resto de naciones aliadas iniciaron un proceso de integración.
La tecnología detrás del Link 16 emplea el Acceso Múltiple por División de Acceso (TDMA, por sus iniciales en inglés) para "proporcionar múltiples rutas de comunicación simultánea a través de diferentes redes", tal y como explican desde BAE System, una de las compañías que fabrica sistemas compatibles con el estándar.
Es considerado el estándar de referencia actual de la industria y con el que otros sistemas se comparan para evaluar su nivel de seguridad. "Ha sido reconocido por la Fuerza Aérea de EEUU como un factor clave para salvar vidas en múltiples teatros debido a la mayor conciencia situacional que ofrece".
A diferencia de otros tipos de enlace de comunicaciones, "Link 16 mejora la seguridad, la resistencia a las interferencias y el conocimiento de la situación", continúan desde BAE Systems. "Al mismo tiempo que aumenta el rendimiento de los datos y la capacidad de intercambio de información". Además de un canal de voz segura, también proporciona capacidad de navegación relativa y la ubicación e identificación precisas de los participantes de la misión.

A400M reabasteciendo en vuelo a cazas Eurofighter, ambas plataformas cuentan con conexión Link 16
Sin embargo, todo este despliegue tecnológico esencial para cualquier Fuerza Armada, y crítico en momentos de guerra, pasa por Estados Unidos en las operaciones conjuntas. La rama de la OTAN controlada ahora por Trump "es la que gestiona y distribuye las claves criptográficas a todas las naciones que son usuarias de esta red de comunicación" mientras se encuentran trabajando codo con codo, indica Francisco Delgado. "Se ha guardado ese derecho", recalca. Una garantía sin la cual todo el sistema dejaría de funcionar.
El organismo responsable de la distribución de las claves a los países OTAN y aliados es la Agencia de Distribución y Contabilidad (DACAN), ubicada en Washington D.C., que las envía a cada una de las Agencias Nacionales de Distribución situadas en los países receptores. Esta última es la encargada de distribuirlas a cada una de las Cuentas Criptográficas subordinadas.
"Para que dos entidades que se están comunicando se entiendan, tienen que compartir una de estas claves", afirma Francisco Delgado. Si esa coordinación no se realiza, ninguna de las partes sabe cómo se están cifrando los datos que se intercambian y el sistema pierde la razón de su existencia.
En el ámbito del Ministerio de Defensa español, las Cuentas subordinadas son las pertenecientes al Ejército de Tierra, Ejército del Aire y del Espacio, Armada y Estado Mayor de la Defensa (EMAD). El siguiente paso es la distribución a cada una de las subcuentas operativas en cada una de las ramas de las Fuerzas Armadas y el EMAD y, estos últimos, a las unidades.

Representación esquemática del funcionamiento de Link 16
Siguiendo la cadena de transmisión, si Estados Unidos decide cortar la generación y distribución de claves criptográficas, las capacidades de comunicación por parte de todos los estamentos críticos del Ministerio de Defensa se verían mermadas en una hipotética operación conjunta de todas las fuerzas de la Alianza.
España cuenta con otros protocolos y sistemas para la transmisión de información de forma segura —por ejemplo, empleando la constelación de satélites de Hisdesat—, aunque ninguna de ellas con el mismo propósito y capacidad de compartir datos esenciales de las operaciones entre plataformas de forma automática.