A día de hoy no es raro encontrar un teléfono con resistencia al agua y al polvo. Desde hace años esta ventaja estaba reservada a la alta alcurnia de dispositivos móviles, siendo incluso un reclamo de venta. Estandarizada como está, la resistencia IP tiene un principal problema: por mucho que un móvil esté protegido con IP no se debe mojar en agua salada.

El agua marina tiene cloruro sódico (sal), un componente de alta conductividad que ante los gadgets tiene un amplio poder de corrosión. La sal produce lo que se llama como corrosión galvánica, ya que el agua salada conduce la electricidad que contiene iones que atraen a los iones de metales. Esto provoca corrosión y por ende óxido, por lo que es totalmente contrario a los componentes electrónicos. Sí, esto imposibilita sacar fotos bajo el mar.

Afortunadamente existen carcasas que permiten sacar fotos bajo el agua salada. Pero, ¿y si queremos un gadget que nos permita sacar fotos increíbles? Con opciones avanzadas como un ordenador que nos pueda mostrar parámetros como la profundidad. Existe, y será tu mejor amiga a la hora de hacer incursiones submarinas fotográficas.

Con esta carcasa podrás sacar fotos bajo el mar a nivel casi profesional

Esencialmente, Diveroid UW es una carcasa avanzada para poder sacar fotografías a nivel de submarinismo. Sí, es cierto que carcasas aislantes ante el agua hay a montones y a precios absurdos. Pero además de no ser completamente seguras, no dejan de ser en muchísimos casos bolsas de plástico herméticas que como máximo te dejan interactuar con el móvil. Ya ni hablamos de sacar una fotografía como tal.

Diveroid lleva el concepto más allá, teniendo incluso un pequeño ordenador integrado preparado para el buceo que nos da información sobre parámetros como la profundidad y además añade funciones especiales para la fotografía submarina. Estamos no solo ante una carcasa para smartphone sumergible, sino ante una cámara submarina con ordenador integrado.

Hay que remarcar que Diveroid no está pensada para los especialistas en este campo, es decir, el sector más profesional; su target es más para entusiastas del buceo que quieran una herramienta todo en uno. Esto es debido a que la carcasa combina nuestro smartphone con un ordenador a bordo desmontable que se comunica con una app.

Diveroid nos ofrece alertas de seguridad personalizadas, datos superpuestos sobre la interfaz del dispositivo que metamos dentro de la carcasa y controles accesibles para interactuar con ellos a través de 3 botones físicos en la parte frontal de la carcasa. Cada interfaz de cámara es distinta y con la app podremos sacar fotografías de forma sencilla con estos 3 botones.

Recordemos que tenemos que estar buceando mientras sostenemos una carcasa (bastante grande) con un smartphone dentro. Por lo tanto, la usabilidad de la carcasa está pensada para uso a una mano; con varios toques podremos, por ejemplo, cambiar ángulos de visión, activar correcciones de color (para evitar distorsiones de color debido al agua), etcétera. Todo el registro de actividad y fotografía se recoge en la app. Además de las fotos, también tendremos información detallada de la inmersión.

Este es un proyecto de Kickstarter que alude directamente a un problema que suelen tener los fotógrafos: la compra de equipo. La fotografía no es un hobby especialmente barato, y Diveroid viene a ser una solución a la necesidad de un ordenador de buceo, una cámara (resistente al agua) y demás.

El proyecto, al momento de escribir estas líneas, ha cumplido su objetivo de 9.029 euros con más de 76.000. El pack básico cuesta unos 250 dólares, e incluye la carcasa sumado a otros accesorios. En teoría Diveroid es una carcasa universal que admite marcas como Samsung, Oppo, OnePlus y Huawei, pero puedes comprobar en su página de Kickstarter si tu móvil es compatible.