Un niño de tan solo 8 años ha usado YouTube para aprender a conducir porque tenía ganas de una hamburguesa. Lo “mejor” de todo es que lo ha conseguido.

¿Quién no ha usado nunca YouTube para aprender algo? En fin de año, por ejemplo, siempre se repite la misma búsqueda: cómo hacer el nudo de corbata. Cuando se nos rompe algo, más de lo mismo. Cuando tenemos un problema lo más probable es que siempre recurramos a Internet y en especial a YouTube.

Que YouTube es una buena herramienta para consumir información es obvio. Que sirve como método didáctico (y muy bueno, además), también lo es. Y no es para menos, pues un niño de 8 años del condado que Columbia quería una hamburguesa e hizo todo lo posible para conseguirlo. Al parecer sus padres estaban dormidos y no se le ocurrió otra cosa que aprender a conducir mediante videotutoriales de YouTube para irse a comprar la dichosa hamburguesa.

En YouTube hay todo tipo de vídeos. Sobre todo de tutoriales, que tienen mucho lugar en la plataforma. Y si a eso lo sumamos que aprender a conducir un coche no es, digamoslo así, lo más complicado del mundo, tenemos una combinación perfecta: un niño hambriento, un coche aparcado y un  McDonald’s deseoso de recibir nuevos clientes.

YouTube como medio de aprendizaje

Lo sorprendente de todo este asunto no es que el niño haya llegado (casi, pues fue interceptado por la policía) a su destino, sino que lo haya hecho gracias a una aplicación web.

Es una de las mejores cosas que tiene YouTube: tiene cabida para todo (mientras el contenido sea legal y no infrinja los derechos de autor). Por lo tanto, y aunque el niño se quedase sin su hamburguesa (lo más probable, pues no se sabe), ya podemos casi confirmar que tanto YouTube como las nuevas tecnologías en sí se han convertido en el nuevo método de aprendizaje. Y aunque las escuelas aún sean reacias a actualizarse, está claro que es mucho mejor.

La situación de YouTube es muy buena: podemos repetir tantas veces los vídeos como queramos, además de que hay gente con mucho tiempo y que explica muy bien las cosas paso a paso y en un lenguaje muy sencillo. Lo único que falta es que de el paso y deje de ser una herramienta para reforzar, para comenzar a ser la herramienta para aprender.

Para los curiosos, el niño está bien y la policía lo interceptó gracias al aviso de varias personas. Según afirman, respetaba las normas de seguridad. Por último, se abrió una investigación para comprobar los hábitos alimenticios del niño, pero parece que eran correctos y que lo que ocurrió era algo puntual.