Un futuro en que las máquinas pueden cifrar mensajes que los humanos no podemos descifrar. No suena nada bien.

El desarrollo de IAs cada vez más inteligentes y autónomas es prometedor, pero en ocasiones también impone un poco de respeto. Al igual que muchas otras compañías importantes del sector tecnológico, Google tiene varios departamentos dedicados sólo al desarrollo de IAs.

Google Brain es un proyecto de investigación que nació en 2011 y en el que están explotando el deep learning. Lo último que han conseguido es que una inteligencia artificial sea capaz crear su propio sistema de cifrado, estableciendo una comunicación que sólo ella es capaz de entender.

Alice, Bob y Eve: las redes neuronales de Google Brain

miedointeligenciasartificiales5

En concreto, los investigadores Martín Abadi y David Andersen han estado experimentado con 3 redes neuronales distintas, a las que han llamado Alice, Bob y Eve.

Cara una de las redes neuronales tenía una función. Alice tenía como misión enviar un mensaje secreto que sólo Bob pudiese leer. Al mismo tiempo Eve tendría que hacer lo posible para interceptar y descifrar dicho mensaje. ¿Interesante verdad? Pues al principio todo fue bastante ‘mal’, Alice y Bob no conseguían establecer una comunicación demasiado privada y Eve se enteraba de todo, pero como se suele decir: paciencia.

Tras más de 15.000 intentos, Alice consiguió idear un sistema de cifrado, una estrategia para ocultar el mensaje distinta a los algoritmos comunes que nosotros, los humanos, hemos creado. Lo más interesante es que, al mismo tiempo, Bob lo entendió y encontró la manera de descifrarlos. ¿Qué pasó con Eve? Pues sólo fue capaz de enterarse de la mitad.

Comunicaciones cifradas que sólo las redes neuronales pueden descifrar

El mensaje era de 16 bits y sólo consiguió adivinar la mitad. Como cada bit eran 0 o 1, el acierto pudo ser casualidad. Obviamente el cifrado era muy básico, sobre todo comparado con los sistemas de seguridad que nosotros ya hemos creado. De todos modos, tampoco tendría un sentido práctico permitir que una Inteligencia Artificial cree cifrados que sólo ella puede descifrar.

Todo avance es bueno, un pasito más. Recordemos que hace unas semanas Google consiguió que su IA aprendiese por sí misma, sin necesitar humanos para adaptarse y solucionar problemas.