Llevar puestas por la calle unas gafas marca Google de realidad aumentada que te han costado 1500$ no debe ser la cosa más cómoda del mundo. Y no me refiero a que la montura sea molesta, sino a que uno debe ir constantemente pendiente de si se las roban, y es que llaman mucho la atención.

Google ha pensado en ello, y el pasado jueves patentó una nueva tecnología para sus Google Glass que permite detectar movimientos extraños en el usuario que las lleva puestas, tirones o acciones similares que puedan indicar un supuesto robo.

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La primera medida que llevarían a cabo las gafas al detectar un robo sería desactivarlas y dejarlas completamente inservibles para el ladrón, de modo que no tendría más que una montura con un aparato extraño en el ojo derecho. Después emitiría una alarma y avisaría a la policía para denunciar el robo automáticamente.

Este tipo de medidas son cada vez más necesarias y fáciles de implementar para nuestros dispositivos móviles. Cualquiera puede instalar sistemas de trackeo en su teléfono y localizarlo en un mapa a través de un navegador web. Esto es algo similar pero bastante más avanzado, lo que uno podría esperar de estas gafas tan de ciencia ficción.

vía | Wired