Concretamente el ganador ha sido Hartverdrahtet, una animación de 3 minutos en la que podremos maravillarnos ante el autentico derroche de genialidad de este grupo de artistas. Un universo de fractales acompañados de una música muy acorde, todo ello en algo menos de lo que ocupa un documento de Word vacío. ¿Increíble? No, esto amigos mios, es el desafío al que se enfrentan algunos programadores, artistas y músicos.

Pero la cosa, como deja patente esos 4Kb que deben ocupar los archivos, viene de lejos. Hace muchos años, poco antes de la era PC surgía la Demoscene. Qué es eso de la Demoscene, os preguntaréis. Seguramente los que ya tengáis encima muchas horas de vuelo sabréis de que se trata, pero para los que no, la Demoscene era una especie de subcultura surgida a raíz de la aparición de los procesadores de 16 bits. Algo que empezaron los crackers, aquellos piratillas que se dedicaban a crear código para eliminar los métodos de protección anticopia de los programas. Ellos, además de quitar la protección, creaban una firma, un sello propio en forma de pequeña introducción. Una manera de fardar y alardear de conocimientos en programación. Cuando se iniciaba el programa, antes veíamos la intro que habían creado, su marca personal. Uno muy prolífico fue el colectivo Razor 1911.

Todo esto fue evolucionando y surgieron las Demos, animaciones más largas que las intros, en las que una vez más se exprimía hasta el último recurso de la máquina creando gráficos, animaciones y música. Era una competición por descubrir quien era mejor, ya que antes de que apareciera el PC, las máquinas tenían todas similares características. Pero cuando surgió el PC y se popularizó, la competición dejó de tener tanto sentido. Aún así, mientras que no hubo internet y el trapicheo de aplicaciones se hacía con disquettes, muchos pudimos disfrutar de auténticas maravillas creadas por estos grupos.

Ahora existen todavía muchos concursos como el de PC 4kB, sobretodo en las grandes Parties de todo el mundo, incluso en la Campus Party o la Euskalparty tienen su hueco. Es un auténtico disfrute ver cómo se lo curran, y al igual que con Hartverdrahtet, si os gusta podéis rebuscar entre los archivos de escena.org o demoscene.org para descubrir joyas de ayer y hoy. Dejad salir vuestra vena más nostálgica y retro.

Hartverdrahtet se puede descargar y ejecutar en Windows XP/ Vista/ 7.

Via Pasalavida