
Pareja sonriendo abrazada en el salón.
Qué son las 'parejas ASA': la nueva tendencia en el amor que más recomiendan los psicólogos en España
Conforme la sociedad va evolucionando, también lo hacen los prototipos de relaciones sentimentales que no dudan en probar nuevas versiones.
Más información: Qué es el 'burnout': el síndrome del que alerta el psiquiatra Enrique Rojas y que sufre el 96% de los españoles
Generalizar, en la gran mayoría de los casos es un error, pero más aún cuando se hace para referirse a una relación sentimental. Cada una de ellas es un mundo y, conforme el tiempo (y con ello, la sociedad) va cambiando, cada vez son más los tipos de pareja que existen.
En pleno 2025, una nueva tendencia ha llegado para quedarse y está generando conversación en redes, sobre todo en TikTok. Se trata de las llamadas "parejas ASA", un nuevo concepto que plantea si dormir separados fuera la clave para estar más unidos, aunque no todas las vertientes psicológicas están tan de acuerdo.
A pesar de ser un término que ya existe en la geometría, refiriéndose al sistema matemático ASA (ángulo-lado-ángulo en un triángulo), en este caso hace referencia, de forma coloquial, a esas parejas que comparten hogar, pero no cama. Es decir, viven juntas, pero duermen en habitaciones separadas.
La idea comenzó a circular con fuerza gracias a un vídeo viral en TikTok que ha superado el millón de visualizaciones. En él, un creador de contenido explica por qué decidió dormir en otra habitación, y cómo ese simple gesto transformó su relación.
Desde entonces, el concepto "parejas ASA" ha conquistado a miles de personas que no se sienten cómodas durmiendo con su pareja, pero tampoco quieren renunciar a la convivencia ni al amor.
¿Qué son las 'parejas ASA'?
Puede parecer una ocurrencia de internet, pero lo cierto es que dormir en camas o habitaciones separadas no es nada nuevo. Muchos matrimonios de décadas lo han practicado sin ponerle nombre. La diferencia ahora es que ya no se esconde, ni se interpreta como un fracaso. Al contrario, se presenta como una decisión consciente y saludable.
Además, este fenómeno se está extendiendo por todo tipo de perfiles: desde parejas jóvenes que acaban de mudarse juntas, hasta parejas consolidadas que buscan reequilibrar la convivencia tras años de compartir cama.
Incluso se están viendo adaptaciones arquitectónicas en viviendas, que contemplan dos habitaciones con acceso compartido a un baño o vestidor. Y es que, no hay una única forma "correcta" de amar ni de vivir en pareja.
Dormir sin tu pareja
Aunque suene contradictorio, dormir por separado puede mejorar la relación, ya que garantizaría una mejor calidad de descanso para ambos, y eso se traduce en mejor humor, menos discusiones y más energía para compartir tiempo de calidad.
Entre las principales ventajas que tienen este tipo de parejas, que tan populares se están volviendo, están:
- Mejor descanso: cada uno duerme en su colchón ideal, a la temperatura que prefiere y sin interrupciones por ronquidos, vueltas o luces del móvil.
- Menos conflictos: dormir mal genera irritabilidad. Dormir bien, en cambio, mejora el estado de ánimo y reduce roces innecesarios.
- Más deseo sexual: muchos aseguran que no dormir juntos aumenta la pasión. Al no compartir cama cada noche, el reencuentro se vuelve más especial.
- Tiempo propio sin culpa: tener tu propio espacio dentro de la relación ayuda a mantener la identidad individual sin renunciar al vínculo emocional.
Durante mucho tiempo, se ha asumido que dormir juntos es una obligación implícita en cualquier relación estable. Pero las "parejas ASA" desafían esta idea y reivindican el derecho a redefinir las reglas de la convivencia. Dormir separados no significa querer menos, ni estar distantes. Significa elegir el bienestar sin sacrificar el vínculo.
De hecho, muchas personas que han adoptado este modelo coinciden en que nunca habían dormido tan bien ni se habían sentido tan conectadas emocionalmente. Algunos incluso aseguran que ahora disfrutan más de los momentos íntimos, porque no están marcados por la rutina, sino por el deseo genuino de compartir.
Dormir juntos no es una obligación
No se trata de imponer un modelo, sino de explorar posibilidades. Si crees que dormir por separado puede beneficiar tu descanso, tu relación o tu salud mental, habla con tu pareja sin miedo. Lo importante no es cumplir con expectativas externas, sino crear juntos un espacio que os funcione a ambos.
Puedes empezar por probar un par de noches a la semana. O incluso mantener habitaciones separadas, pero dormir juntos cuando os apetezca. Como en todo, la clave está en la comunicación, el respeto mutuo y la flexibilidad.
Por eso, se considera que las "parejas ASA" no son una moda vacía. Son el reflejo de un cambio cultural profundo que prioriza la salud emocional, el descanso y la autenticidad en la convivencia. Y si bien no es un modelo para todo el mundo, sí es una alternativa valiosa para muchas personas que hasta ahora no se sentían representadas en los cánones tradicionales del amor.