Adrián Chico, psicólogo: "Deja de justificar el daño que te hacen solo porque esa persona lo pasó mal"

A la hora de afrontar las diferentes situaciones que pueden darse en una relación de pareja, hay que tener claros cuáles son los errores más frecuentes que se cometen y cómo tratar de evitar que vuelvan a darse en el futuro. En esta ocasión, el psicólogo Adrián Chico, ha compartido a través de su cuenta de TikTok (@itsadrianchico) un vídeo en el que habla de una situación muy frecuente en parejas, que justifican el mal comportamiento de la otra parte.

El experto comienza asegurando que es un gran error justificar la actitud de aquellas personas que se portan mal, con excusas de que han sufrido en el pasado o lo han pasado muy mal, y que incluso a ellas no les ha hecho nada malo a nivel personal. Y es que, aunque todo eso sea cierto, realmente está haciendo un mal, un daño y por ello no se debe tratar de proteger.

Asegura que una persona no tiene la responsabilidad de buscar la razón o causa por la que la otra se comporta de esa manera, ya que no es su obligación, sino que lo que verdaderamente importa es que está provocando un daño a una persona. En estos casos, se debe buscar que esa persona sea capaz de reconocer sus errores y responsabilizarse de sus actos. Después, una vez que lo haga, quizás sí haya la oportunidad de justificar, entender y perdonar.

Sin embargo, mientras la persona se esté comportando de una forma no apropiada, Adrián Chico asegura que las justificaciones sobran.

En muchas de las ocasiones, la justificación hacia otra persona acerca de sus malos actos viene provocada por lo que conocemos como una relación tóxica. Se define de esta forma a aquellas parejas en las que no hay apoyo ni respeto, y en las que en los conflictos una de las partes trata de quedar por encima de la otra.

Luis Malibran

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De esta forma, podemos considerar que es una relación tóxica cualquier relación entre personas que no se apoyan mutuamente, en la que existe un conflicto y uno trata de socavar al otro, en la que existe competencia y en la que hay faltas de respeto. En muchas de las ocasiones este tipo de relaciones vienen acompañadas de manipulación emocional y dependencia emocional, y pueden llegar a ser agotadoras, además de provocar otros problemas a nivel psicológico.

Para poder saber si se está ante una relación tóxica, hay que tener en cuenta las siguientes señales:

• Falta de apoyo: si tu pareja te hace sentir que lo que haces es tu obligación y quita importancia tus logros personales o profesionales, es posible que te sientas menospreciado, y esto es algo que no encaja demasiado en una relación sana, que debe basarse en que se desea mutuamente que la otra parte tenga éxito en todos los ámbitos de la vida. Si una relación es tóxica, cada resultado parece una competición.
• Control, desconfianza y celos: en ocasiones una persona insegura puede estar muy atenta al principio de la relación con la otra y le dedica gran parte de su tiempo, pero realmente puede venir dado porque haya desconfianza y control. Preguntar siempre dónde está la otra persona o si se enfada porque la otra parte no responde de inmediato a los mensajes, son actitudes que fomentan la toxicidad en la pareja.
• Manipulación emocional: otra de las señales de que se está en una relación tóxica se produce cuando una de las partes utiliza el chantaje emocional para tratar de conseguir lo que quiere en cada momento, controlando así a la otra parte para conseguir sus propios fines.
• Comunicación con toxicidad: si en lugar de utilizar un trato amable, se recurre a la crítica, la hostilidad o el sarcasmo con gran frecuencia, se trata de una señal de alerta, ya que en cualquier relación sana tiene que primar el respeto entre ambas partes.
• Ignorar necesidades: si se mantienen relaciones sexuales, aunque no apetezca solo para que la pareja no se enfade, o ya no se ponen prendas porque no le gustan, son otros indicios de que te encuentras en la relación tóxica.
• Estrés frecuente en pareja: todas las relaciones pasan por momentos de tensión, pero llegar a encontrarse con frecuencia al límite es un indicador de que algo no va bien.
• Perder otras relaciones: si se deja de pasar tiempo con familiares o amigos solo por evitar conflictos con la pareja o para no tener que dar explicaciones, centrando todo el tiempo libre en la pareja de forma exclusiva, es muy posible que se esté ante una relación tóxica.
• Minimización: cuando se tiene un problema, pero la otra pareja le quita constantemente importancia y esto sucede con frecuencia, es posible que se trate de una relación tóxica. Una relación sana debe ser un lugar en el que poder encontrar apoyo para afrontar los problemas y las dificultades, todo ello desde la comprensión y la empatía.
• Justificar constantemente las acciones de la pareja: precisamente una de las señales de la relación tóxica es justificar constantemente las acciones de la otra persona, como indica Adrián Chico. Justificar todo lo que dice o hace, aunque en el fondo no se esté de acuerdo con ello, es una señal clave.

De esta manera, conviene prestar atención a todos estos indicios, sobre todo cuando existen sospechas de que algo no va bien.