La conciliación todavía es una asignatura pendiente en el deporte de élite. Pese a las peticiones de las atletas para poder llevar a sus hijos a los Juegos Olímpicos de Tokio, la falta de facilidades ha hecho que muchas hayan tenido que anteponer su trabajo a su familia. Una de ellas ha sido la nadadora española Ona Carbonell

La capitana del equipo de natación sincronizada tuvo a su hijo Kai hace un año y ha subido un vídeo a las redes sociales expresando su decepción por no poder llevárselo a los Juegos, cuando todavía está en periodo de lactancia.  

"Cuando parí a Kai y vi que me estaba poniendo en forma y que podía llegar a los Juegos de Tokio, lo primero que hice fue preguntar si podía llevármelo porque le daba lactancia y me dijeron que no. Hace unas semanas algunas deportistas colgaron en las redes esta situación difícil de tener que escoger entre la lactancia y la conciliación familiar y unos Juegos Olímpicos, que no puede ser compatible", comienza en su publicación, donde aparece dando de mamar a su pequeño.

Debido a estas quejas de diferentes atletas Carbonell habló con las diferentes instituciones deportivas: el Comité Olímpico Español que, en sus palabras "me ha ayudado muchísimo", el Consejo Superior de Deportes, el COI... Finalmente, envió una petición al COI para ver si podía llevar a Kai y hace un par de semanas le confirmaron que sí podía. Sin embargo, tal y como ha contado la nadadora, las condiciones las pone el Gobierno de Japón que ella califica de "incompatibles con poder rendir en los Juegos Olímpicos y con que tu familia esté lo mejor posible".

"Las condiciones son que Pablo -su pareja y padre de su hijo- y Kai tendrían que estar en un hotel, no sabemos a qué distancia de la Villa. No podrían salir del hotel en los veintipico días que yo esté en Tokio y para ir a darle lactancia a Kai tendría que salir de la Villa, salir de mi burbuja e ir hasta el hotel", explica. "Pondría en riesgo al equipo en los JJOO, que es un objetivo que llevamos mucho tiempo peleando, y a la vez creo que no es lo adecuado para ellos estar sin poder salir de la habitación tantos días".

Por esa razón, Carbonell ha decidido dejar a su hijo en España mientras ella está en Japón. "Me sabe muy mal y espero que este vídeo y que todas estas deportistas que están pasando por lo mismo ayude a normalizar esta situación. Espero que a otras atletas sí que le sirvan estas condiciones y puedan llevar a su hijo".

"En mi caso no, lo voy a pasar mal", admite. "Voy a estar veintipico días con el sacaleches y solo espero que cuando llegue pueda seguir la lactancia, siga teniendo leche, y Kai pueda seguir enganchándose al pecho que es algo que me importa mucho". 

Finalmente, la deportista agradece a su equipo, al COI, al COE, al CSD y "a todas mis compis, mi entrenadora y mi familia por ayudarme tanto". "Espero que esto sirva para el futuro, para los próximos juegos y para otras próximas competiciones", concluye.

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