Usar una funda impermeable, encerar la carrocería y lavar los bajos tras una nevada ayuda a preservar pintura, gomas y componentes metálicos.

Usar una funda impermeable, encerar la carrocería y lavar los bajos tras una nevada ayuda a preservar pintura, gomas y componentes metálicos. Jesús Diges Agencia EFE

Motor

Expertos revelan cómo cuidar el coche aparcado durante nevadas o temperaturas muy bajas

La mayoría de voces mencionan que es indispensable cuidar diversos elementos como el circuito de refrigeración, la batería, entre otros. 

Más información: Un experto en automoción lo deja claro: esta es la temperatura correcta de la calefacción del coche en invierno

Publicada

Cuando llegan las primeras heladas y la nieve empieza a aparecer en carreteras y aparcamientos, muchos conductores en España se preguntan cómo evitar averías y daños en sus vehículos. Aunque dejar el coche parado durante periodos de frío intenso parece inofensivo, lo cierto es que puede generar problemas en la batería, los neumáticos, la pintura o incluso el motor

Los elementos esenciales que deben revisarse antes de que llegue el frío

De acuerdo con Volkswagen, uno de los primeros puntos que debe revisarse es el anticongelante. Asegurar un nivel adecuado y una mezcla correcta es indispensable para evitar que el circuito de refrigeración se congele durante las noches más frías. También recomiendan comprobar el estado de las gomas y el sistema de climatización del vehículo, ya que el frío extremo acelera su deterioro.

Según el portal de mantenimiento State Farm, otro elemento clave son los neumáticos. Las temperaturas bajas reducen la presión, lo que afecta la adherencia en superficies heladas. Mantener la presión correcta y revisar el desgaste de la banda de rodadura evita pérdidas de tracción y mejora la seguridad al circular o maniobrar sobre nieve.

Batería, limpiaparabrisas y visibilidad: lo más delicado del invierno

La batería es uno de los componentes que más sufre, ya que el frío reduce la capacidad de carga, especialmente en baterías con más de tres años. Mantener limpios los bornes, revisar conexiones y, si es posible, utilizar cargadores de mantenimiento evita que el coche se quede sin energía tras varios días parado.

Por su parte, la NHTSA recuerda la importancia de utilizar líquido limpiaparabrisas con anticongelante, ya que un producto convencional puede congelarse en la luna y dañar el sistema de limpieza. Este tipo de consejos es especialmente útil en zonas españolas como Soria, Burgos, Teruel o León, donde las temperaturas bajo cero son frecuentes en invierno.

Proteger la carrocería y los bajos frente a sal, nieve y humedad

La nieve por sí sola no suele dañar el coche, pero la mezcla de humedad, hielo y sal que se esparce en carreteras sí puede producir corrosión con el tiempo. Según especialistas en cuidado de vehículos citados por Detailer Lab, usar una funda impermeable, encerar la carrocería y lavar los bajos tras una nevada ayuda a preservar pintura, gomas y componentes metálicos.

Para quienes aparcan en la calle, recomiendan además levantar los limpiaparabrisas para que no se peguen al cristal y evitar accionar el sistema cuando todavía hay hielo en la superficie, ya que podría romper las gomas.