El BMW X1 comercializa actualmente su tercera generación, si bien este SUV lo pudimos conocer en primicia en junio del año pasado. En esta ocasión hemos tenido la oportunidad de realizar una prueba dinámica con la versión híbrida enchufable (PHEV) y la 100% eléctrica, conocida como BMW iX1.

Es la primera vez que el BMW X1 cuenta un sistema de propulsión totalmente eléctrico, aunque también dispone de motores de combustión de gasolina y diésel. Por tanto, hablamos de un coche con una gama bastante amplia y que se puede adaptar a las necesidades de cada cliente.

El BMW X1 híbrido enchufable puede tener una autonomía de hasta 92 kilómetros.

Además, cabe destacar que el tenista Carlos Alcaraz es embajador de la marca alemana y es precisamente el BMW iX1 el coche que utiliza en su día a día. Al tratarse de un modelo eléctrico puede beneficiarse de tener la etiqueta cero de la DGT, con la que no tiene restricciones de movilidad y puede estacionar gratis en la calle en algunas ciudades como Madrid.

El lugar de producción del BMW X1 es la planta del Grupo BMW ubicada en la ciudad de Ratisbona (Alemania). Por primera vez saldrán de una misma línea de montaje motores térmicos, híbridos enchufables y la variante completamente eléctrica.

El BMW X1 es un SUV de tamaño medio (segmento C), por lo que se puede equiparar con modelos como un Audi Q3, Mercedes GLA, Volvo XC40, Lexus UX, Range Rover Evoque y Jaguar E-Pace. Respecto a sus rivales cero emisiones, podemos mencionar al Audi Q4 e-tron o Mercedes EQA.

El BMW X1 tiene una longitud de 4,50 metros de largo.

Diseño corpulento

A lo largo de las tres generaciones el BMW X1 ha ido evolucionando hacia una imagen más robusta, con facciones muy acentuadas y contornos más cuadrados. En el frontal destaca una parrilla con riñones prácticamente cuadrados, junto a los grupos ópticos LED adaptativos.

Estos integran como opción la función luz Matrix, que sirve para distribuir de una manera más óptima la iluminación del entorno. Por otro lado, los intermitentes son dinámicos y se encienden de manera progresiva y lineal, desde el interior hacia el exterior.

En cuanto a las llantas, el BMW X1 integra de serie unas de aleación de 17 pulgadas, mientras que con el acabado xLine y paquete M Sport pueden ser de 18, 19 o 20 pulgadas. Para la carrocería se pueden elegir dos tonos sólidos y diez metalizados.

El BMW X1 tiene ahora una parilla con riñones más grandes.

Esta nueva generación es más grande que la anterior, un aspecto que se ve reflejado en sus proporciones exteriores: 4,50 metros de largo (+5,3 cm), 1,84 metros de ancho (+2,4 centímetros) y 1,64 metros de alto (+4,4 centímetros). Asimismo, su distancia entre ejes también ha aumentado hasta los 2,69 metros (2 centímetros más).

Interior más digital

Lo primero que llama la atención del interior del BMW X1 es su pantalla conocida como BMW Curved Display, compuesta por un cuadro de mandos de 10,2 pulgadas y una pantalla multimedia de 10,7 pulgadas. Esta destaca sobre todo por incorporar el último sistema operativo (octava generación) y una forma ligeramente curvada.

Otro elemento clave del interior del BMW X1 es su reposabrazos central, el cual resulta bastante cómodo porque integra el selector de marchas, la rueda del volumen o el botón para las luces de emergencia. Además, se caracteriza por ser flotante, por lo que debajo brinda un generoso espacio para guardar objetos.

El BMW X1 tiene en el interior el BMW Curved Display compuesto por dos pantallas.

La capacidad del maletero ahora también ha crecido, ya que en las versiones de combustión el volumen llega a los 540 litros (+35 litros) y 1.600 litros con los asientos abatidos, mientras que en la variante híbrida enchufable es de 500 litros (+50 litros).

En el BMW iX1 (eléctrico puro) la capacidad se reduce hasta los 490 litros, por el espacio que ocupan las baterías. De manera opcional para las versiones térmicas los asientos se pueden desplazar longitudinalmente, e incluso se pueden abatir o ajustar de forma individual.

Motores electrificados

Como hemos mencionado antes, las variantes que hemos conocido en esta presentación han sido las híbridas enchufables y la eléctrica pura. Las primeras son el BMW X1 xDrive25e y el xDrive30e, con 245 CV y 326 CV respectivamente. En este sentido, pueden tener una autonomía de hasta 92 kilómetros en la versión de entrada y hasta 88 kilómetros en la más potente.

En el caso del BMW iX1, su mecánica está compuesta por dos motores eléctricos, uno en cada eje. El resultado es una potencia conjunta de 313 CV y un par máximo de 494 Nm, con tracción total y un 0 a 100 km/h en 5,7 segundos.

El BMW iX1 tiene una autonomía eléctrica de hasta 438 kilómetros.

La batería tiene 64,7 kWh de capacidad, lo que permite obtener una autonomía de hasta 438 kilómetros. Esta permite cargas de hasta 22 kW en corriente alterna y de 130 kW en corriente continua. Por tanto, en una corriente continúa de gran potencia se pueden recuperar 100 kilómetros en tan solo 8 minutos.

Precios: desde 55.050 euros

En relación con los precios del BMW X1 híbrido enchufable y el BMW iX1 encontramos un coste de partida de 55.050 euros con la versión xDrive25e (sin descuentos adicionales). A continuación, vamos a desglosar todas las cifras:

BMW X1 híbrido enchufable

BMW iX1

Así es en carretera

La prueba de conducción comenzó con el BMW X1 xDrive25e, es decir, el híbrido enchufable de 245 CV. Al ponernos en el puesto del conductor la autonomía eléctrica marcaba 91 kilómetros, una cifra muy buena pero que se puede alterar en función de la conducción que se haga.

Nuestra unidad contaba con el acabado M Sport, el cual tiene un precio extra de 4.000 euros e incluye elementos exclusivos como el volante de cuero o los asientos deportivos. Al iniciar la ruta con el BMW X1 pudimos comprobar cómo se desenvuelve únicamente con propulsión eléctrica, y las sensaciones percibidas fueron de suavidad, aplomo y buen empuje.

El BMW iX1 ofrece el modo B con el que se puede recuperar energía eléctrica.

En esta modalidad el BMW X1 híbrido enchufable puede circular hasta los 140 km/h, mientras que con el motor de combustión puede llegar a los 190 km/h. Para recargar la batería, esta admite una potencia de 7,4 kW, por lo que en unas dos horas y media se puede conseguir el 100% de la carga.

Por otro lado, a los mandos del BMW iX1 lo primero que nos sorprendió fue el sonido "eléctrico" que desprende, más o menos acentuado en función del modo de conducción.

Una función interesante del BMW iX1 es el modo B (Brake) con el que se puede conseguir una retención considerable. Gracias a este cuando se levanta el pie del acelerador el propio coche frena y se produce la frenada regenerativa, por lo que la energía cinética se transforma en energía eléctrica. 

En definitiva, el BMW X1 (en cualquiera de sus versiones) es un coche razonable por sus prestaciones, calidad de rodadura y capacidad interior. Además, esta nueva generación cuenta con una estética mucho más atractiva, totalmente compatible tanto para familias como para un perfil más juvenil.

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