Subaru acaba de iniciar la venta en España del nuevo Impreza ecoHybrid. Se trata de la versión híbrida (combina un motor de gasolina con un generador eléctrico) de este modelo que se enmarca dentro de la categoría de los compactos y del que la firma japonesa espera vender unas 2.000 unidades al año en España.

Este Subaru Impreza actual, que fue lanzado en 2018, es un coche clave para la marca japonesa. Entre otras razones porque ya va por su quinta generación y de él se han comercializado cerca de tres millones de unidades en todo el mundo.

Si bien desde hace algunos años este Impreza ya se estaba vendiendo en España con el motor 1.6 de 114 CV, desde ahora, esta versión deja de comercializarse para que la gama se quede solo con la variante híbrida. Un tipo de sistema de propulsión que va asociado a la etiqueta ECO, de la DGT.

De esta manera, Subaru hace una apuesta total por la etiqueta ECO de la DGT ya que todos sus modelos la incorporan. Ya sea este Impreza híbrido que aquí analizamos o bien el reto de modelos como el Forester y el XV (que disponen del mismo sistema de hibridación).

Y tampoco podemos olvidarnos del Outback, que también está disponible con GLP (Gas Licuado del Petróleo) y, por lo tanto, también recibe la etiqueta ECO. Esta gama ECO, por tanto, permitirá, con total seguridad superar el 76% de ventas de vehículos ECO que Subaru tuvo el pasado año.

Este coche destaca por su tamaño, ya que roza los 4,5 metros, lo que le sitúa como un compacto de gran longitud.

En cuanto a las características principales del coche destacan el diseño diferenciado, con un frontal y un lateral que sugieren un centro de gravedad más bajo; las tomas de aire que recorren todo el frontal del coche, los nuevos grupos ópticos de led, el rediseño de las llantas…

A ello hay que sumarle que es un coche prácticamente único en el mercado. No tanto por su sistema de hibridación (hay más compactos híbridos en el mercado como el Toyota Corolla, Hyundai Ioniq, Lexus CT) pero sí por combinar el hecho de que sea un motor híbrido con un sistema de tracción total (aquí no hay nada similar).

En cuanto al sistema de propulsión es el mencionado motor 1.6 de 114 CV que ahora pasa a tener 150 CV de potencia. A ello se suma un motor eléctrico de 17 CV y una batería de capacidad justa (0,57 kW), pero que le permite ayudar al motor de combustión para circular algunos metros (en torno a 1 o 2 kilómetros) en eléctrico puro y, sobre todo, bajar consumos. En este sentido, el Subaru Impreza marca un consumo de 7,7 litros y unas emisiones de 174 gramos de CO2.

El Subaru Impreza en marcha es un coche muy suave.

En marcha

Una vez en marcha, nos quedamos con tres elementos que a nuestro juicio son claves. El primero de ellos es el alto nivel de acabado que ofrece la marca. Estamos ante un coche bien terminado, con buenos ajustes, quizás algo sobrio en su presentación (muy estilo japonés) pero que estamos muy seguros de que tendrá una buena evolución en el paso por tiempo.

También nos parece llamativo, la suavidad y el confort de marcha. Si no pisamos en exceso el acelerador, el Impreza va entre algodones. Es muy suave. Eso sí, en el momento en el que tengamos que pisar con fuerza, el cambio automático de tipo convertidor de par hará que el coche se revolucione y aumente el ruido en el interior.

Al tener tracción total, este coche sale de cualquier terreno nevado o con barro.

Otro elemento a tener en cuenta en este coche, sobre todo para aquellas personas que vivan en lugares fríos o altos es la tracción 4x4. De hecho, como decíamos anteriormente no existe otro modelo híbrido igual con esta tracción total. Y esto es un seguro de vida en momentos, por ejemplo, como los vividos con Filomena, ya que si por algo se caracterizan los Subaru es por desenvolverse a las mil maravillas en terrenos resbaladizos con barro o carreteras nevadas.

En estas condiciones un Subaru 'siempre' sale airoso. Y si a la tracción 4x4 le calzamos unos buenos neumáticos de invierno, tendremos un vehículo con el que podremos atravesar cualquier carretera nevada o pista embarrada, en lo más crudo del invierno.

Destacados también el nuevo chasis, que es el que emplea el XV, con una gran rigidez torsional y lo bien que está configurado el sistema de suspensiones que evita el balanceo. Además, recordamos en este sentido que esta plataforma será la que soporte una electrificación total. En este sentido, desde Subaru nos recuerdan que en 2025 llegará su primer SUV 100% eléctrico, fruto del acuerdo de colaboración con Toyota.

Otra virtud de este modelo son las ayudas a la conducción que ofrecen un plus de seguridad. Según Subaru, de serie este modelo viene equipado con el sistema 'EyeSight', que incluye entre otros elementos el aviso de frenada precolisión, control de crucero adaptativo o aviso de cambio involuntario de carril… Otros elementos destacables en el equipamiento son el asistente de cambio de luces largas a cortas, cámara de visión trasera, reposacabezas activos y ajustables o faros delanteros y traseros LED, entre otros.

El nuevo Impreza híbrido está ya disponible en el mercado nacional por un precio de 31.250 euros, incluyendo los descuentos de 2.000 euros de una campaña promocional de lanzamiento.