Sí, lo sabemos. Un coche eléctrico es caro. Muy caro, incluso, podemos decir. De esto no hay duda. A igualdad de potencia y equipamiento un coche eléctrico puede ser entre 6.000 y 10.000 euros más caro que uno convencional.

Por ejemplo, si tomamos como referencia un coche eléctrico que se fabrica en España (el Opel Corsa) vemos que las versiones de combustión tienen los siguienes precios y ofertas:

Y si ahora vemos este mismo modelo con la variante 100% eléctrica comprobamos que el precio es mucho más elevado (si bien podrían restarse ayudas en algunas comunidades):

Sin embargo, también tenemos que reconocer que estos precios son elevados ahora, porque la demanda todavía es baja y porque el volumen de fabricación es relativamente contenido. Sin embargo, en el momento en el que solo se fabriquen eléctricos (que no falta tanto), la situación cambiará. Y no parece que esto esté tan lejos como pensamos.

De hecho, la Unión Europea quiere reducir todavía más las emisiones medias de los fabricantes. Y las ciudades cada vez contarán con más restricciones. Así que todo ello redundará, sí o sí, en una mayor demanda de los eléctricos.

Con este Opel Corsa hemos conseguido un consumo de 13,1 kWh. José Luis Cano

Cuánto consume un coche eléctrico

Sin embargo, hoy 'estamos' aquí para hablar de otra cosa. Nos hemos propuesto saber (de verdad) cuánto gasta un coche eléctrico circulando solo por ciudad, en principio su ambiente más propicio.

Y para ello hemos tomado un coche eléctrico de referencia. Se trata del Opel Corsa-e, un modelo de orientación urbana por su pequeño tamaño, que se fabrica en España (en la planta de Zaragoza) y del que, además, ya se han vendido unas 500 unidades, desde que fuera lanzado en 2020.

Imagen del ordenador con el consumo realizado. José Luis Cano

Recorremos Madrid con un eléctrico

Pues bien para saber, cuánto gasta este Opel Corsa-e, hemos decidido realizar un recorrido de unos 30 kilómetros por la ciudad de Madrid. El recorrido, además, incluye varios tipos de escenarios: centro histórico, calles con tráfico, vías de circunvalación…

Hemos querido realizar una prueba transparente de cuál es el gasto real de un coche eléctrico en lo que a energía se refiere. Eso sí, para intentar ser lo más eficientes posible hemos circulado sin calefacción ni aire acondicionado, ya que la temperatura del habitáculo era razonable y no la necesitábamos. Además, así tenemos que reconocer que podemos bajar un poco más el consumo.

Así que dicho y hecho, nos ponemos manos a la obra. Una vez que recogemos el coche en la fábrica de Villaverde del Grupo Stellantis (ahora es así como se llama a la factoría del Grupo PSA, donde se fabrica el Citroën C4) decidimos poner rumbo hacia el centro de Madrid.

Nuestro destino es la plaza del Emperador Carlos V, en la Glorieta de Atocha. Sin embargo, en lugar de ir directos vamos a cruzar el centro de la capital. Tenemos que aprovechar que tenemos un etiqueta CERO y que podemos entrar y salir sin límite (al ser eléctrico) por el centro de Madrid (Madrid Central).

Mientras tanto, aprovechamos todo lo posible para realizar una conducción eficiente. Intentamos salir suaves cuando se abre los semáforos, pisamos muy 'flojito' el acelerador para evitar gastos excesivos y aprovechamos la inercia cuando la calle tiene algún descenso para gastar lo menos posible. Además, también tratamos de anticiparnos a las situaciones de retenciones, con frenadas suaves para regenere la mayor carga posible, y cuando vemos que llegamos a un cruce, glorieta o semáforo levantamos el pie para ahorrar energía.

Esto no solo nos permite disfrutar de otra manera de conducir. Para empezar, tienes que estar más pendiente de hacer bien los deberes para ser más eficiente. También con ello te conviertes en un mayor observador de todo lo que ocurre a tu alrededor, ya que al viajar con un silencio absoluto, se escucha (y mucho) todo lo que nos rodea.

Continuamos el recorrido por el Paseo de Yeserías, Pontones, Ronda de Segovia, pasamos por el viaducto, Calle de la Colegiata, de la Magdalena para finalmente llegar a la Calle de Atocha y a la Plaza de Emperador Carlos V.

Con el Opel Corsa-e recorrer 10.000 kilómetros al año en ciudad tiene un coste de 130 euros.

Sin pagar por aparcar en la calle

Es otra de las ventajas que tenemos a la hora de desplazarnos por el centro de Madrid con un eléctrico. Hablamos del hecho de no pagar por el estacionamiento regulado. Para demostrarlo, hemos decidido aparcar en la Calle del Hospital, muy cerca de la calle Argumosa y, por tanto a un par de minutos de la plaza Juan Goytisolo, nuestro destino final.

Aquí, en estas calles de Madrid Central tendríamos que haber pagado 1,20 euros por una hora, 2,95 euros por dos horas, 5,40 euros por tres horas… Sin embargo, con nuestro Corsa-e podemos dejarlo todo el tiempo que necesitemos que no tendremos ni que pagar, ni siquiera que sacar el tique de la máquina.

Recorrido de vuelta y consumo final

Es el momento de volver de nuevo a Villaverde para devolver el coche y analizar el consumo que hemos obtenido. Una nueva ocasión para volver a contabilizar el consumo del eléctrico que llevamos. En esta ocasión, además, también circularemos por alguna carretera de circunvalación para que la conducción sea mixta.

Unos minutos después, hemos llegado a nuestro destino. Así que es el momento de echar números. Miramos el ordenador del coche que muestra que hemos recorrido 27 kilómetros, a una media de 26 km/h y con un gasto de 13,1 kWh/100 kilómetros.

Podemos decir que es una velocidad media razonable en el día a día de una gran ciudad. Y el gasto en kWh también consideramos que no está mal del todo. Con algunos eléctricos más pequeños (Seat Mii) hemos conseguido acercarnos a los 10-12 kWh/100 kilómetros. Y con otros como el Hyundai Kona EV hemos obtenido unos 15 kWh/100 kilómetros.

Ahora toca saber cuánto dinero cuesta este gasto de electricidad en el caso de tener que cargar el coche en casa. Y aquí habría que hablar del coste de instalación del punto de carga (que según nuestras estimaciones ronda los 1.700 euros y se paga en una única ocasión); el término de potencia fijo que, por ejemplo según señala Iberdrola es de 57 euros al año, y después el término de energía o lo que pagamos por el KWh.

En este sentido, analizando los recibos del domicilio particular obtenemos que el precio del kWh es de 0,19 euros, una cifra que según los especialistas en la materia podría bajar hasta los hasta los 0,10 euros si utilizamos horas supervalle para la carga y tenemos tarifas específicas.

Por tanto ya podemos realizar los cálculos finales. Si multiplicamos el consumo del coche (13,1 kWh/100 kilómetros) por el precio del kWh tendremos que el gasto del coche eléctrico es de 2,48 euros por cada 100 kilómetros con el precio del kWh a 0,18 euros y 1,31 euros por cada 100 kilómetros con el precio del kWh a 0,10 euros.

Y si extrapolamos este gasto a lo que puede suponer una conducción real de un año, de unos 10.000 kilómetros, podemos señalar que el gasto anual en electricidad se situaría entre los 131 y los 235 euros, cifra a la que habría que sumar el gasto en el término de potencia (los mencionados 57 euros) más la instalación del punto.

Ahora… y por último, hagamos esta misma extrapolación con un Opel Corsa de gasolina. Tomaremos como referencia el consumo oficial (4,2 litros) por el precio actual de la gasolina (1,24 euros). Por tanto, tenemos que el gasto de este coche con 10.000 kilómetros es de 420 litros (como mínimo), que en euros se traduce en 520 euros al año en combustible, es decir, más del doble que un eléctrico. Además, la cifra de 4,2 litros es demasiado optimista, ya que en realidad es más probable hablar de 5 o incluso 6 litros en ciudad, lo que elevaría el gasto hasta 500 o 600 litros (620 o 744 euros).

Radiografía del coche eléctrico.

¿Y los que no tienen cargador en casa?

Es cierto que no todos los usuarios pueden cargar el coche en casa o en el trabajo. Esto es, de hecho, el principal obstáculo del coche eléctrico en España. Por ello desde Opel han presentado las aplicaciones móviles, MyOpel y Free2Move, para facilitar la conducción del modelo así como su recarga.

Así, por ejemplo, desde el teléfono móvil se pueden buscar puntos de carga en cerca de 200.000 electrolineras de Europa (Charge my car). Y también se puede gestionar la carga en casa. En este sentido el Opel Corsa-e cuenta con 337 kilómetros de autonomía (oficial) con su batería de 50 kWh.

En cuanto al tiempo de carga, todo dependerá de la potencia de la misma. En este sentido en el domicilio el Opel Corsa admite desde la carga menos potente en monofásico que son muchas horas (prácticamente un día entero cargando) hasta la más común, también en monofásico, con 7,4 kW y un total de 7 horas y media de carga. Por último también está la carga con corriente continua (DC) de hasta 100 kW. Repasamos en este último cuadro los tiempos de carga.