Planta de motores de Ford Almussafes.

Planta de motores de Ford Almussafes. EE

Motor AUTOMÓVIL

Ford Almussafes gana puntos para fabricar motores híbridos

La multinacional americana ultima una decisión clave previa a la jugosa adjudicación, a la que aspira con opciones la factoría.

3 septiembre, 2020 08:37
Valencia

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Ford Motor Company ultima una decisión que puede resultar clave para el futuro de su planta española. Fuentes del sector del automóvil explican a EL ESPAÑOL que la multinacional americana va a asignar un proyecto para el mercado norteamericano que consiste en la fabricación del motor 2.0 GTI de gasolina.

Tal adjudicación, según subrayan las mismas fuentes, podría ser la antesala para una carga de trabajo mucho más valiosa: la fabricación para Europa de un ‘motor híbrido’ (2.5 gasolina conectado a una batería), cuya producción puede garantizar una importante carga de trabajo en los próximos años. Y este es precisamente el objetivo de la factoría de Almussafes: imponerse en la carrera por esta gran adjudicación.

El proyecto le va como anillo al dedo a Ford Almussafes, que es quien fabrica para el mercado el Ford Kuga híbrido enchufable, cuyo motor se importa actualmente de la factoría mexicana de Chihuahua. Además, se da la circunstancia de que la enseña del óvalo ha decidido dejar de fabricar en Almussafes (a partir de 2023) los motores Ecoboost que representan actualmente el grueso de la carga de trabajo de la planta de motores de la industria valenciana, que emplea a alrededor de mil trabajadores.

En resumen: la fábrica valenciana tiene experiencia y capacidad para fabricar los motores que van a adjudicarse y, además, sería un enclave idóneo para hacerlo al contar con la producción de la versión híbrida enchufable del Ford Kuga. La dirección de Ford Almussafes se ha volcado para conseguirlo y el clima actual en el sector del automóvil valenciano es de optimismo ante las adjudicaciones en liza, si bien fuentes oficiales de la industria subrayan que, de momento, se trata tan solo de “especulaciones”.

La adjudicación de un motor híbrido para Almussafes ha sido durante los últimos meses una de las banderas de UGT, el sindicato que lidera el comité de empresa de la factoría -presidido por Carlos Faubel-. El sindicalista, no obstante, se remitió este miércoles al escrito que lanzó su organización el pasado mes de julio, cuando reclamó esta carga de trabajo para la planta valenciana.

“Reunimos las condiciones”

"Reunimos todas las condiciones para hacerlo de la manera más eficaz", afirmó entonces. "El día 14 de noviembre de 2019, con el aval del Comité de Empresa Europeo, hicimos entrega de una carta al presidente de Ford Europa, como consecuencia de la decisión que anunció Ford, desde Detroit, de no fabricar en Valencia la siguiente generación de los motores que producimos en la actualidad", recordó sobre la situación de la industria UGT, que expuso "los argumentos por los que la dirección de la compañía debía explorar las oportunidades de fabricar en la planta los motores híbridos para el mercado europeo".

"Desde UGT vamos a exigir a la dirección europea de Ford nuestro lugar en esta reorganización y rediseño del negocio que la compañía está iniciando, y Almussafes ha de ser el centro de fabricación no solo de motores, sino también de vehículos híbridos en esa futura electrificación de Ford Europa. Ya hemos demostrado en muchas ocasiones nuestra capacidad para alcanzar acuerdos y asumir retos. Por lo tanto, la nueva dirección europea no debe tener dudas en apostar por Valencia, y no entenderemos otra decisión que no vaya encaminada en ese sentido", manifiestaron al respecto.

Cabe subrayar además que captar carga de trabajo de futuro es fundamental en la actualidad para cualquier planta fabricante de automóviles, pues el contexto de crisis global y de profundo cambio en el sector obligará a las marcas multinacionales a tomar decisiones estratégicas, y estas pasan por la concentración de la actividad en determinadas plantas. Ello sumirá a las mismas en una lucha entre hermanas para evitar los inevitables recortes por parte de los grupos propietarios.

La pandemia, de momento, ha llevado a la dirección de la factoría a aprobar un total de seis ERTE para adecuar la producción de vehículos a una demanda menguante, una reducción de la actividad que se suma al ERE de 350 trabajadores que aprobó la dirección de la fábrica el pasado mes de mayo.