El coche eléctrico comienza poco a poco a entrar de forma más seria en los hogares españoles debido, entre otros motivos, a un significativo avance en las tecnologías que lo componen, ampliando de forma notable la autonomía y las prestaciones de este tipo de propulsión alternativa. 

No obstante, a día de hoy sigue siendo necesario un estímulo por parte de las administraciones, un impulso que llega en forma de ayudas económicas a la compra de vehículos eléctricos encuadradas dentro del Plan MOVEA 2017, renovando así al MOVEA de años anteriores con un planteamiento similar. 

El Plan de Impulso a la Movilidad con Vehículos de Energías Alternativas (MOVEA) contará este año con un presupuesto de 16,6 millones de euros, de los cuales 12 millones están destinados a la movilidad eléctrica. Este plan asiste, además de a los vehículos eléctricos, a aquellos propulsados por GLP (gas licuado de petróleo) y GNC, (gas natural comprimido). 

7 millones están destinados a los turismos, 4 millones son para vehículos ligeros comerciales y 1 millón para el despliegue de puntos de recarga para coches eléctricos, ayudas que como hasta el momento se podrán tramitar directamente en el concesionario en el que se adquiera el vehículo en cuestión. 

Un particular podrá acceder a una ayuda máxima de 5.500 euros por la compra de un vehículo 100% eléctrico, a los que podrá sumar otros 1.000 euros adicionales en el caso de instalar también un punto de recarga vinculado a dicho vehículo. Por su parte, las empresas verán reducida la cuantía de las ayudas, que pasarán de 5.500 euros por vehículo a 4.000 euros.

Además de vehículos nuevos, el MOVEA 2017 cubrirá también la compra de vehículos de ocasión con hasta 9 meses de antigüedad, por lo que algunas unidades de stock pueden convertirse en una gran oportunidad de compra para todos aquellos usuarios que se estén planteando dar el salto al coche 100% eléctrico.