Los adolescentes de los ochenta soñaban con tener una relación amorosa como las que tenían las princesas y príncipes Disney. Los de los 90 quisieron tener algo parecido a lo que tiene el creador de contenidos fuengiroleño IlloJuan, con su pareja Masi, actriz, locutora, cantante y creadora de contenidos, también malagueña. Pero, sin embargo, los nacidos en los 2000, los chavales de la era TikTok, no se fijan en el amor de los anteriormente mencionados, sino en el de Carliyo el Nervio y Natalia Palacios, dos tiktokers malagueños que levantan pasiones en redes sociales por su naturalidad y espontaneidad. Aunque su relación ya era un secreto a voces, el pasado mes de mayo contaron al mundo su amor confirmando su relación en un vídeo y, desde entonces, sus números no paran de crecer.

La historia de Carliyo y Natalia comienza el pasado invierno, cuando Natalia contó a sus seguidores en TikTok que iba a marcharse a Nueva York junto a un desconocido. Natalia que seguía a Carlos ya por aquel entonces, le confesó por privado lo mucho que le gustaban sus vídeos y en la charla, este le propuso un viaje a Nueva York tras descubrir que había vuelos baratos. Ella no lo dudó y se fue con él sin pensarlo a la aventura.

Hay quien dice que su historia de amor es digna de cuento. Pues en los primeros contenidos del viaje que ambos subieron ya se podía ver que el feeling surgía entre ambos. Tanto fue así que inventaron una sección llamada 'el confesionario'. En ella, al final de cada jornada del viaje, los jóvenes le contaban a sus seguidores sus impresiones sobre el otro. Aún no han reconocido si el primer beso surgió en aquel viaje.

La cuestión es que volvieron y los vídeos de Natalia y Carliyo comenzaron a ser casi diarios. Hacían viajes juntos, contaban sus anécdotas... Sus seguidores tenían claro que estaban saliendo. No fue hasta mayo, cuando durante un viaje a París, alertaron a sus seguidores que iban a hacer el confesionario más importantes de sus vidas. Y a continuación subieron un vídeo dándose el beso que confirmaba su relación.

Desde entonces, viajan muchísimo y prácticamente no se separan --ahora ella está haciendo voluntariado en la India, pero parece que él acabará visitándola-- y los adolescentes le tienen como la pareja más perfecta de Internet.