El atractivo turístico que ya tiene Ronda, una de las localidades más visitadas de toda Andalucía, ganará un nuevo hito en los próximos meses con lo que viene a ser una especie de Caminito del Rey en la localidad rondeña.

Y ello después de que la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico (CPPH) de Málaga haya informado este viernes favorablemente la autorización para que el Ayuntamiento de la localidad pueda acometer el proyecto de la pasarela peatonal prevista en la garganta del Tajo. 

La resolución de la comisión, órgano dependiente de la Delegación territorial de Turismo, Cultura y Deporte y que se ha reunido este viernes en Málaga, considera que la intervención propuesta resulta "compatible" con los bienes patrimoniales del entorno, resultando positiva en cuanto a la mejora en su conservación, salvaguarda y difusión.

Así lo han informado desde el Gobierno andaluz en un comunicado, en el que se precisa que una vez analizado el proyecto se considera que sus dimensiones son reducidas en relación con la gran escala de la garganta del Tajo de Ronda y explica que los materiales a emplear se integran sin estridencias en el entorno.

Asimismo, el nuevo proyecto no produce alteraciones sobre los bienes de interés cultural en cuyos entornos se pretende construir ni sobre el conjunto histórico de Ronda, al encontrase a una cota sensiblemente inferior a la de aquellos, no siendo tampoco un elemento visualmente agresivo.

Por el contrario, el informe resalta que la instalación de la pasarela genera un recorrido que permitirá la contemplación de los bienes protegidos desde perspectivas inéditas, creando una nueva experiencia de visita y fomentando así tanto el enriquecimiento como el uso como bien social del patrimonio histórico.

Según la documentación presentada, la actuación pretendida consiste en la construcción de una pasarela peatonal de 1,20 metros de anchura (en sus tramos "tipo", con variaciones adaptativas), yuxtapuesta a la pared sur del Tajo de Ronda y próxima al cauce del río Guadalevín (tres metros sobre el nivel de las aguas, según el proyecto), en el tramo comprendido aproximadamente entre el Puente Nuevo y el Puente Viejo, con el objetivo de hacer este recorrido transitable al público en general.