De todo a nada en apenas un mes. Juan Carlos Maldonado ha pasado de ser el hombre fuerte de Cs en la Diputación de Málaga a quedarse sin la vicepresidencia del ente y sin la tenencia de alcaldía de Mijas. Desde que dio el paso de abandonar al partido liberal, la suya ha sido una caída en picado que ahora le deja como diputado y concejal raso, sin ninguna de las obligaciones que desempeñaba.

Se le ha quedado antigua ya la biografía de Twitter en la que orgullosamente se presentaba como: "Vicepresidente de la Diputación de Málaga, responsable de Málaga de Moda, Juventud, Educación, Deportes y Empleo. Primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Mijas y vicepresidente segundo consejero de Turismo y Planificación Costa del Sol". 

Quien llegó a ser alcalde de Mijas entre 2015 y 2019 hoy no es más que un concejal no adscrito sin ninguna responsabilidad. Una desescalada meteórica para alguien que venía de ser ejemplo de la resistencia de Ciudadanos tras la primera parte de la interminable crisis que sufren los liberales.

Pasado socialista

En 1995, con 25 años, se afilió al PSOE y fue un militante relativamente activo, según recuerdan fuentes socialistas. Así, es en 2004 cuando se une a la agrupación de Mijas y su trabajo empieza a ser más destacado. Tal es así, que en las elecciones de 2011 concurre como número cuatro en las listas.

Es concejal en la oposición en el mandato 2011-2015, cuando Ángel Nozal era alcalde de la localidad mijeña. Por entonces, al poco de ser elegido, abandonó el PSOE y, en aquella ocasión sí, dejó su acta de concejal.

De su militancia socialista mantiene una buena relación con el hoy presidente del partido, Pepe Bernal, quien fuera alcalde de Marbella. En ese sentido, en fechas cercanas fuentes socialistas confirman a EL ESPAÑOL de Málaga que han mantenido "conversaciones profundas" sobre el futuro de Maldonado -sobre todo en la Diputación-, pero que no han cuajado gracias a la intercesión de Dani Pérez, secretario general, que ha calmado los ánimos levantiscos de parte del grupo municipal.

Alcalde en 2015

Cuando la ola de la regeneración de los nuevos partidos estaba en su punto álgido, Maldonado sacó un buen resultado: 5 ediles, frente a los 7 del PSOE y los 11 del PP. Los populares accedieron a ceder la Alcaldía a Cs.

Poco duró el acuerdo. En abril de 2016 se rompió el pacto y Ángel Nozal y sus diez concejales salieron del equipo de Maldonado. Gobernó en minoría durante el verano y a finales de septiembre pactó con el PSOE.

Maldonado no dejó que la hierba creciera a su paso y se cerró la puerta con Ángel Nozal, con quien no llegó a tener una relación fluida. El pacto con el PSOE terminó de romper la armonía con el PP local y el mandato fue ciertamente complicado, al sumar sólo 12 concejales frente a los 11 del PP, siendo 13 la mayoría absoluta.

Teniente de alcalde

En 2019 los resultados vuelven a ser buenos para Maldonado. Consigue un concejal más y la suma con el PSOE les da para gobernar en mayoría: 14 ediles. El PP, con 9 asientos, vuelve a quedarse fuera tras ganar las elecciones.

Entonces pacta con Josele González y el socialista se erige como alcalde. En el comunicado del cese de Maldonado como teniente de alcalde este fin de semana, se hacía ver que su trabajo en la localidad era mínimo por la responsabilidad en Diputación.

La salida de Maldonado, en principio, deja vía libre a que el PSOE mantenga a los otros 5 ediles de Ciudadanos a su lado y mantengan los 13 necesarios para la mayoría absoluta. Sin embargo, la suma de PP, CS y Vox podría alterar la realidad del municipio.

El terremoto vivido en Torremolinos y la repentina salida de Maldonado con duras acusaciones contra el presidente de la Diputación, no dejan de mostrar la posibilidad de que Mijas pueda ser una nueva pieza en juego. 

Facción de Cs

Por otra parte, Maldonado mantiene alguna amistad en el partido liberal. Aunque su salida ha sido incomprendida por prácticamente todos sus compañeros, sí tiene relación con otros, como es el caso de Javier Pareja de Vega. El diputado andaluz y Maldonado son buenos amigos y así lo han hecho constar en el último mes. Junto a ellos, el exsecretario de organización de los liberales, Vicente Ruiz, y el exárbitro y condenado por coacción a Juan Cassá, Paradas Romero.

La relación de amistad se fragua en su pertenencia al partido al que ahora Paradas Romero y Maldonado dicen no reconocer, pero en el que sigue militando Pareja. Militantes de Cs confirman a este medio que "resulta muy raro para el partido que haya un cargo público del partido junto a personas que no respetan a Cs".

Fuentes liberales afirman que en esa comida del 16 de noviembre se fragua la operación salida de Maldonado: "Creen que Hervías en el PP le va a dar cobertura, pero nada más lejos". Por otro lado, uno de los asistentes al almuerzo indica que "no hablamos de trabajo, fue una reunión de amigos".

Cassá, enemigo íntimo

Aparte de coincidir en Cs, Pareja, Maldonado y Ruiz coinciden en no tener en buena estima a Juan Cassá. Cada uno por un motivo diferente, pero todos por el poder que el asturiano llegó a tener en Málaga y lo arbitrario de su ejercicio.

A pesar de eso, por parte de Maldonado ha habido un acercamiento: "Cuando les ha sido útil se ha olvidado de todo lo malo que han sostenido en público y en privado de Cassá, ahora le hace falta y lo utiliza", afirman fuentes de Cs que critican "la falta de moral y principios".

La animadversión se convirtió en colaboración cuando ambos lanzaron una petición por escrito al PP nacional para que se les recibiera "con urgencia" para mantener la estabilidad en la Diputación. Un gesto que fuentes del PP y de Cs han calificado como "ridículo". Hasta el momento, no han recibido respuesta de los populares.