El traje de Málaga se estrecha en su Centro y en los barrios tradicionales para hacerse grande en su periferia. Son los distritos localizados al oeste de la capital de la Costa del Sol los que permiten a la urbe seguir ganando vecinos y aumentando su capacidad demográfica. 

Las estadísticas del padrón municipal confirman esta realidad en términos de población. Y no solo si tomamos como referencia los valores del último año, en el que Teatinos-Universidad es con diferencia el espacio que más habitantes gana (+1.384), sino si extrapolamos la comparativa a la década.

Atendiendo a esta equiparación, mientras que barrios largamente consolidados como Centro, Carretera de Cádiz, Cruz de Humilladero y Este pierden residentes, los entornos localizados en el extremo occidental crecen. 

El más claro ejemplo es el de Teatinos-Universidad, cuya declaración formal como distrito por parte del Ayuntamiento tuvo lugar en 2013. A principios de ese ejercicio el padrón tenía registrados 34.791 personas, 7.192 menos que los actuales 41.983. En términos absolutos es claramente el que más aumenta en población. 

Le siguen Puerto de la Torre, que tiene censados a 33.741 vecinos, 4.639 más que en 2013; Churriana, con 21.317 habitantes, 2.047 más que hace una década, y Campanillas, que suma 1.685 empadronados más. La suma de todos ellos supone un crecimiento de 15.563 vecinos más para la ciudad.

Frente a esta tendencia, el distrito Este ha perdido en este intervalo de tiempo 2.069 vecinos; Carretera de Cádiz, 1.592 vecinos; Cruz de Humilladero, 1.218; y Centro, 893. Y esto supone un -5.772.

Tras algunos ejercicios en los que algunos de estos distritos han venido bajando en número de habitantes, los datos de inicios de 2023 apuntan un cambio de la tendencia. Y, de hecho, han subido en vecinos. Cruz de Humilladero tiene 972 censados más que el 1 de enero de 2022; Centro, 851 más; Carretera de Cádiz, 445, y Este, 305. La suma, de 2.573, sigue estando algo por detrás de los 3.000 vecinos que incorporan los distritos de la periferia oeste, con Teatinos-Universidad como principal referente, con +1.384. 

Aunque son numerosas las variables que han debido contribuir a este proceso, es incuestionable que una de las razones que puede explicar este relativo despoblamiento de distritos más populares o tradicionales puede ser el impacto real del incremento de los precios de la vivienda, ya sea en venta o alquiler. 

Un factor que ha podido obligar a muchos vecinos locales a tener que buscar alternativas residenciales en zonas, a priori, más económicas en el extrarradio de la capital o, incluso, en otros municipios de la corona metropolitana.

Y, en relación con este mismo proceso, otro elemento que juega a favor del crecimiento demográfico en Teatinos-Universidad y Puerto de la Torre, principalmente, que son, por el momento, los espacios geográficos de natural crecimiento residencial de la ciudad. 

Es justamente en ellos donde se están localizando muchas de las nuevas promociones impulsadas en la última década. Una tendencia que, a priori, tendrá continuidad en el tiempo, abriéndose el abanico, además, a Campanillas, que dispone de grandes bolsas de suelo aún por desarrollar.