Málaga, ciudad elevada a la categoría de referente del turismo cultural, situada en el escaparate de los grandes fondos de inversión y epicentro de las mayores subidas de los precios del residencial, aspira, además, a posicionarse ahora "a la vanguardia investigadora en temas de biodiversidad terrestre, marina y urbana".

Con este reto en el horizonte, el Ayuntamiento de Málaga ha activado la contratación de un equipo de expertos para realizar un estudio sobre fauna marina en el litoral de Málaga (cetáceos y tortugas marinas) y realizar una caracterización del grado de contaminación de la urbe a través de un mapa de olores.

Este último documento tiene un valor ciertamente particular en la apuesta de la capital de la Costa del Sol por elevar sus estándares medioambientales. Tal y como se destaca en el pliego de condiciones que rige la licitación de esta asistencia técnica, son numerosos los estudios que se han realizado han demostrado una alta correlación existente entre áreas con baja calidad de aire y las áreas en las que los usuarios de las redes sociales detectan olores relacionados con las emisiones con palabras clave como "gasolina", "polvoriento", "cansado" y "coche". 

Frente a ello, los contaminantes del aire están menos presentes en áreas donde los usuarios de las redes sociales detectan olores de la naturaleza: "floral", "lavanda", "césped" y "sulfuro". 

La pretensión del paso dado ahora por el Consistorio, en el marco del programa Lifewatch Alborán, cofinanciado con fondos europeos, es generar un mapa de olores de Málaga sobre una metodología basada en el uso de redes sociales como fuente de datos. 

"Son pocas las ciudades del mundo que han incluido en su planificación urbana la elaboración de mapas de olores, y sólo dos de ellas en España (Barcelona y Pamplona), lo que pondría Málaga a la cabeza de este tipo de técnicas de ciencia ciudadana", destacan los promotores de la iniciativa. 

Málaga, en el centro del mar de Alborán

El otro elemento del trabajo que es objeto del contrato tiene que ver con la elaboración de un estudio sobre la fauna marina en el litoral malagueño, situado en el área central del mar de Alborán y zona de paso migratorio Atlántico-Mediterráneo de múltiples especies de fauna marina. 

Se considera necesario hacer un seguimiento a más de 20 especies de aves marinas para conocer dinámicas poblacionales e impactos sobre los ciudadanos. Además, transitan especies amenazadas de interés europeo, como tortugas marinas y cetáceos (rorcual común, tortuga boba, delfín mular), indicadoras de la calidad ambiental de entornos costeros y de efectos de la contaminación (materiales plásticos y su incidencia en la red trófica).

Las actuaciones previstas persiguen la recogida continuada de datos sobre distintas variables que inciden sobre el estado de la biodiversidad y la gestión de los ecosistemas en la ciudad que a través de la creación de los diversos entornos virtuales de investigación permitirá prever futuros escenarios de cambio global.

Así, se pretende disponer de un registro temporal y descriptivo de las especies de tortugas y cetáceos en las costas malagueñas, así como de la calidad del aire en la ciudad; generar bases de datos que permitan hacer inferencias sobre la evolución futura de los espacios litorales urbanos, y relacionar los posibles cambios con un escenario de cambio climático global y local y con el potencial impacto antropogénico. 

Dentro de esta actuación se incluye la creación de una red de atención rápida a varamientos en la costa de mamíferos y tortugas marinas, mediante la capacitación de voluntarios y agentes costeros en la prestación de primeros auxilios en varamientos, registro de datos y muestras para su futuro uso en investigaciones científicas. 

Con los datos de avistamientos "oportunistas" e información de trabajos anteriores, se requiere un programa de conocimiento de avistamientos, que podrá culminar con la aproximación más exacta al conocimiento de la situación de cetáceos en el sector occidental del mar de Alborán. 

Esta asistencia técnica tiene un valor inicial cercano a los 110.000 euros. Las empresas interesadas en concurrir al procedimiento tienen hasta el 10 de agosto próximo para presentar sus ofertas. Desde la formalización del contrato se fija un plazo de 6 meses.