Las patologías y fisuraciones detectadas en la viga de cantil del muelle 3 del Puerto de Málaga, en el que atraca el Melillero, ha hecho que el organismo presidido por Carlos Rubio se haya puesto manos a la obra para realizar los estudios necesarios previos para acometer la rehabilitación de esta parte de la estructura. 

Con este objetivo, la Autoridad Portuaria acaba de licitar la realización de una campaña de auscultación de la citada viga cantil con el objetivo de evitar que los problemas detectados vayan en aumento. Según se reconoce en el pliego de condiciones que rige este contrato, las patologías detectadas son atribuibles a la sulfatación producida por la acción de los cloruros a lo largo del tiempo de exposición. 

Las mismas se han traducido en "fisuraciones de importancia con pérdida de sección, tanto en el hormigón de la viga como en la armadura". Y dado que las patologías "tienden a ir en aumento, es necesario actuar con la máxima brevedad posible para evitar que los daños vayan a mayores".

Vista del muelle 3 del puerto de Málaga.

Con este paso adelante, se busca definir y valorar los ensayos correspondientes a la campaña de auscultación previa a los trabajos de rehabilitación a realizar en la viga cantil del muelle 3. Para ello, la empresa elegida tendrá que extraer 5 testigos en las diferentes alineaciones del muelle para determinar en laboratorio determinados parámetros, caso de la penetración de la carbonatación.

La empresa elegida, además, tendrá que realizar tres placas de carga para determinar la categoría de explanada en la parcela de muelle 5, situada junto los depósitos de Olistock. Y tendrá que realizar un estudio mediante detección de georradar para el posicionamiento del aliviadero que discurre por la parcela H, en el recinto portuario, constituido por el marco del colector de San Lorenzo en un tramo estimado de aproximadamente 50 metros. 

Como complemento a la campaña geotécnica realizada por Cemosa, en la parcela H donde irá ubicado el futuro edificio de Aduanas, y dado que se ha tenido que desplazar la huella del edificio por la más que posible afectación con el colector de San Lorenzo, es preciso la ejecución de dos sondeos con profundidad de 30,5 metros.

Las empresas interesadas tienen hasta el 17 de mayo para presentar sus ofertas. El precio inicial de licitación es de apenas 22.933,23 euros (IVA incluido), siendo el plazo previsto de las actuaciones de 45 días.