Paso a paso, la Empresa Malagueña de Transportes (EMT) avanza en su apuesta decidida por modernizar sus vehículos y disponer de una flota totalmente limpia, con 0 emisiones en el año 2030. Y para ello, a la adquisición de hasta 44 nuevos autobuses entre 2022 y 2024, suma ahora una inversión millonaria para la instalación de 40 cargadores para autobuses eléctricos mediante pantógrafo invertido y manguera de conexión. 

La apuesta municipal, que se beneficia en buena medida de los fondos Next Generation, alcanza los 8.895.890,56 euros (IVA incluido). Este es el precio de partida de la licitación que acaba de activar el Consistorio y que fija un plazo de seis meses para el suministro de esta infraestructura. Un plazo a contar desde la formalización del contrato. Las empresas interesadas tienen hasta el 4 de enero próximo para presentar sus ofertas.

Estos cargadores, según las previsiones de la EMT, serán instalados en los terrenos del Cortijo de Torres ya reservados para acoger las nuevas cocheras de la empresa municipal. Unas dependencias que se encuentran actualmente en Camino de San Rafael.

El objetivo es proporcionar suministro de energía eléctrica en Baja Tensión a 40 cargadores con una potencia unitaria de 180 kW., cada uno, siendo la potencia total a instalar de 7.200 kW.

No obstante, el empujón definitivo para las nuevas cocheras sigue pendiente de la obra, toda vez que ya ha sido aprobado de manera definitiva el estudio de detalle mediante el que se ordena la parcela seleccionada.

Objetivo ambicioso

El plan municipal es el de renovar en los próximos ejercicios buena parte de su flota, que se compone de unos 300 vehículos, con un coste total de unos 23 millones de euros. Para minimizar el impacto que esta operación tenga sobre las cuentas municipales, el Consistorio pretende disponer de la ayuda de los fondos europeos.

Uno de los autobuses híbridos de la Empresa Malagueña de Transportes (EMT).

Con todo, las arcas municipales habrán de hacer frente a cerca de 16 millones de euros, cuantía que vendrá a sumarse a la carga que actualmente ya supone el servicio de autobuses de la ciudad, que reclama todos los años unos 30 millones para ser sostenible económicamente.

De la nueva flota prevista, ya hay 12 megabuses eléctricos-híbridos que fueron incorporados el pasado mes de agosto y que se sumaron a otros 10 de 2021. Así, según los datos aportados por el alcalde, Francisco de la Torre, la EMT ya dispone de 122 unidades que cumplen con la normativa Euro6.

Este es el desglose de los 44 buses anunciados:

1. 10 serán eléctricos de 12 metros de largo. Fueron recientemente adjudicados, disponen de una subvención de 2 millones, aunque el coste total es de casi 6 millones.

2. 10 autobuses eléctricos de 12 metros con una subvención de 2,2 millones. El importe total será de 6 millones.

3. 10 autobuses eléctricos midi de 9-10 metros, con una subvención de 2,2 millones y una inversión de 5,1 millones.

4. 2 autobuses de hidrógeno de 12 metros. Cuenta con una subvención de 540.000 euros, para una inversión global de 1.250.000 euros.

5. 12 megabuses eléctricos-híbridos de 18,75 metros. El importe total es de 4.656.000 euros.

De acuerdo con los detalles aportados por el Consistorio, los 10 primeros autobuses se recibirán a principios de 2023 y la propuesta de adquisición de los 34 restantes se presentará para su aprobación en el próximo Consejo de Administración de la EMT.

A la espera de alcanzar el objetivo final, los pasos adelante de la EMT en este campo son evidentes. Así, desde 2015 ha logrado disminuir más de un 24% las emisiones de gases de efecto invernadero. 

Uno de los efectos más significativos de la apuesta por vehículos sostenibles y no contaminantes es la previsión de reducir al mínimo el consumo de gasóleo. El pico en la última década tuvo lugar en 2017, con unos 7 millones de litros. Tras caer drásticamente el año de la pandemia, 2020, hasta algo más de 5 millones de litros, ha vuelto a subir este ejercicio hasta cerca de los 7 millones.

El objetivo es que desde ya estos parámetros caigan, esperando que en 2027, cuando Málaga aspira a poder celebrar la Expo Internacional, el dato sea de 3.450.000 litros de gasóleo, cayendo hasta los 1.316.000 litros en 2030. Los suficientes para garantizar el funcionamiento de los híbridos.