El Ayuntamiento de Málaga parece haber encontrado finalmente una empresa dispuesta a construir el carril bici que unirá el Centro histórico con el Paseo Marítimo Pablo Ruiz Picasso. Tras solicitar formalmente a todas las participantes del concurso activado hace ahora más de un año que confirmaran su disposición a mantener las ofertas inicialmente formuladas, sólo dos han contestado favorablemente, siendo la entidad General de Viales, S. L. la que reúne las mejores condiciones.

De acuerdo con el acta de la mesa de contratación reunida el pasado viernes, a la que ha tenido acceso EL ESPAÑOL de Málaga, la propuesta seleccionada era la número 16 de todas las que concurrieron a la licitación de esta infraestructura ciclista. El valor económico que, de mantenerse la oferta, tendrá su construcción será de 436.364,72 euros (IVA incluido), con un plazo de materialización de seis meses.

Conforme al devenir de este procedimiento de contratación, que tiene aún que formalizarse, al Consistorio no le ha quedado más remedio que asumir el mal menor, toda vez que durante meses todas y cada una de las empresas mejor valoradas en el concurso fueron renunciando a mantener sus propuestas económicas.

El motivo hay que encontrarlo en el impacto que tanto la crisis derivada de la guerra de Ucrania como la subida de los precios de los materiales de la construcción han tenido sobre el sector. La suma de todos estos factores ha hecho inviable que las firmas hayan podido mantener sus compromisos económicos con este proyecto.

Esta plataforma exclusiva para bicis se ha convertido en toda una odisea para el equipo de gobierno. En el intento de avanzar en el camino, el área de Movilidad llegó a remitir el pasado mes de octubre una comunicación a la mayoría de los concurrentes para que manifestasen "de forma expresa" si optaban por mantener las ofertas presentadas o si, por el contrario, querían retirarlas.

El ramal en cuestión tenía un precio de licitación de 516.774,89 euros (IVA incluido), siendo el plazo de ejecución de seis meses. De acuerdo con los detalles contenidos en la memoria que sirve de base a la intervención, el inicio del trazado se sitúa en el edificio del Rectorado de la Universidad de Málaga, localizado en la avenida Cervantes. Es ahí donde concluye el actual carril bici, que "termina en un bordillo, sin posibilidad de incorporarse al acerado del parque". 

Esta circunstancia hace que la única opción que tienen los ciclistas sea incorporarse a la calzada, "esquivando los separadores cebra del carril bici". En el otro extremo, como punto final de la actuación, se encuentra paseo marítimo, "en donde actualmente dispone de una habitabilidad compartida bici-peatonal, con prioridad hacia el peatonal".

El recorrido del nuevo carril afecta a los siguientes viales: Avenida Cervantes, Plaza del General Torrijos, Paseo de Reding, calle Cervantes Tramo Peatonal, calle Cervantes y el Paseo Marítimo Pablo Ruiz Picasso. 

Uno de los puntos sensibles del recorrido es Torrijos. Sobre ello, se destaca que es "el punto más problemático de todo el trazado" dado que hay que cruzar cuatro tramos de calzada hasta llegar al Paseo de Reding. Actualmente, estos cruces peatonales se realizan independientemente, lo que obliga al peatón a necesitar cuatro ciclos semafóricos para completarlo. 

Para poder introducir el carril bici, el proyecto disponible busca un recorrido continuo, "eliminando los pasos de peatones zigzagueantes". "Para ello es necesario utilizar uno de los carriles de circulación que discurren sentido Málaga Este, que finaliza a la altura de la plaza de toros", se indica. Será necesario también ocupar la calzada en parte de la calle Cervantes, en concreto en unos 140 metros de longitud hasta llegar al paseo.