A la espera de que el Ayuntamiento de Málaga avance en el proyecto del nuevo Astoria, a levantar sobre la parcela que permanece baldía desde hace casi dos años y medio, busca alternativas para responder a las necesidades de espacio del Teatro Cervantes. 

Y lo hace activando una operación que va a permitir al centenario equipamiento cultural malagueño disponer de dos salas de ensayo en la calle Frailes, en un espacio contiguo al teatro. Con este objetivo, el Consejo de Urbanismo que tiene lugar este jueves va a aprobar el proyecto básico y de ejecución de estas salas, a las que se sumará un almacén adicional. El presupuesto de ejecución material estimado es de 749.683 euros (IVA incluido).

De acuerdo con los detalles contenidos en el expediente, al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL de Málaga, la intervención prevé la definición de las obras para la construcción de un edificio de nueva planta que será destinado a las salas de ensayo.

Imagen de la futura edificación.

El solar tiene forma rectangular y actualmente está ocupado por una nave almacén de una planta de altura, al servicio del Teatro Cervantes. Esta circunstancia hace que sea necesaria una demolición previa a la ejecución del nuevo edificio, que cuenta con la preceptiva autorización de la Consejería de Cultura sujeta a la realización de una actividad arqueológica preventiva.

De este modo, la propuesta se desarrolla integrándose en la trama existente, siguiendo los parámetros del PEPRI Centro y el programa de necesidades Teatro. El mismo se desarrolla buscando la funcionalidad del edificio, dejando la planta baja para el uso de almacén desarrollado actualmente, destinando la planta alta a las dos salas de ensayo.

La edificación resultante tendrá una superficie construida de 500 metros cuadrados que se distribuirá entre 196 metros cuadrados en planta baja; 83,25 metros cuadrados en entreplanta; 188,65 metros en la planta primera, y 32,75 metros de cubierta.

Ambos edificios se conectarán a través de la planta primera con la zona de oficinas y camerinos existentes, y a su vez, se le da acceso desde calle Frailes mediante una escalera que forma parte del sector conformado con las salas de ensayo. De este modo, el nuevo edificio se convierte en un nuevo acceso al edificio global.

En cuanto al volumen resultante, será una edificación entre medianeras de altura baja más 3. La geometría de las salas se resuelve con doble altura, dentro de las alturas máximas permitidas, finalizando la parte superior con un forjado inclinado.